El Consejo de la Cultura y las Artes (CNCA) reveló la decisión de la Unesco.
Bailarines valoraron el reconocimiento como un incentivo para la juventud.
Son cofradías de músicos danzantes devotos de la Virgen, cuyos integrantes expresan su fe a través de la música, el baile y el canto. Los Bailes Chinos, oriundos de Andacollo, en la Región de Coquimbo, y que datan de 1585, fueron incorporados a lista de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la Unesco.
Más de 60 agrupaciones del Norte Chico y la zona central del país en conjunto con el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes elevaron su postulación al Comité Intergubernamental para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial, del organismo internacional.
Y fue la ministra de Cultura, Claudia Barattini, quien hizo el anuncio de este reconocimiento a los Bailes Chinos, indicando que "la Unesco ha declarado por primera vez una expresión chilena originaria como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Se trata de una tradición que tiene más de 350 años y que reúne a muchísimas comunidades en el país, a través de bailes, cantos y música. Eso es lo que estamos celebrando y es un gran orgullo para Chile".
Para el integrante del Baile Chino Tamayino, Francisco Galleguillos, el anuncio de la Unesco es una misión cumplida que llama a los jóvenes a motivarse por esta expresión artística.
"Esto lo damos a conocer a nuestra juventud, para que continúe, porque una misión ha sido cumplida. Nos han escuchado y nos van a seguir apoyando. Esto es algo totalmente voluntario, tiene que estar dentro de uno, para poder concretar la misión de bailarle a la Virgen y encomendarse a Dios. Es algo totalmente espiritual", sostuvo.
El ingreso de los Bailes Chinos a la lista de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad fue zanjado en una deliberación en la que participaron 950 representantes de 24 países, que debieron pronunciarse sobre 46 expedientes presentados para integrar la Lista de Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.
