El brasileño Luca di Grassi aseguró que la categoría eléctrica refleja la industria automotriz.
Manifestó que Chile se puede beneficiar mucho con la competencia.
El actual campeón de la Fórmula E, el brasileño Luca di Grassi (Audi), manifestó que la Fórmula 1 debe adaptarse a los cambios de la industria automotriz, porque si no lo hace puede morir como categoría.
En entrevista con El Mercurio, Di Grassi manifestó que "la Fórmula 1 tradicional, como la conocemos hoy y con los equipos que tienen, no va a existir en 20 años o quizás menos".
"La F1 es la principal categoría automovilística del mundo, pero si no se adapta pronto al cambio de la industria va a morir. De aquí a 10 años, o quizás menos, la Fórmula E la puede alcanzar", agregó.
También dio su parecer sobre la F-E, expresando que "cuando la lanzamos hace cuatro años, muy poca gente creía que esto iba a funcionar porque no veían el panorama global. El deporte motor es un reflejo de la industria y el camino ahora va hacia los autos eléctricos por presión de los gobiernos y por razones económicas".
Di Grassi expresó que "el crecimiento de la serie ha sido excepcional. Han ingresado varios constructores y otros ya han anunciado que se incorporarán en los próximos años. También hay un nuevo auspiciador global".
En cuanto a las diferencias con la F1, Di Grassi manifestó que la categoría de autos eléctricos "tiene mucha menos potencia. Estamos hablando de 300 caballos de fuerza contra 800. Pero los circuitos de la F-E son más complicados. Son más estrechos, pequeños, donde es fácil manejar y los errores se pagan caro. El concepto es diferente, pero la técnica no, porque un piloto de Fórmula E será rápido en F1 y viceversa".
Respecto a la fecha en Chile, el piloto comentó que el país tiene "un gran potencial en la industria relacionada con esta serie. El cobre y el litio son muy importantes y los tienen. Si saben invertir bien, podrán crecer y generar trabajos".
"La presencia de la Fórmula E puede ayudar a difundir la idea de esta nueva tecnología y puede abrir un mercado que no ha sido explotado en Chile. Están en la dirección correta, la carrera es solo la punta del iceberg. Debajo hay un gran desarrollo tecnológico pensando en el futuro. Por sus riquezas minerales, Chile se puede beneficiar mucho de la revolución eléctrica", sentenció.
