Pablo Levalle: Correr en el Dakar es un infierno y una satisfacción

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Autor: Cooperativa.cl

El piloto chileno, quien en 2005 terminó la tradicional carrera en tierras africanas, reconoció en diálogo con Cooperativa.cl que vivió una experiencia extrema, pero a la vez se siente afortunado de haber llegado a la meta.

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Por Héctor Uribe Delgado, desde Neuquén, Argentina.

 

El piloto chileno Pablo Levalle tiene más de una historia que contar. En 2005 compitió en el tradicional Rally Dakar y se dio el lujo de terminar la extenuante competencia con pundonor, mucha entrega y sacrificio, aunque ahora, a un año de la proeza, reconoce que fue un infierno.

 

Lavalle se desempeña en el Rally Patagonia-Atacama en el De Gavardo Team como uno de los coordinadores del equipo y en conversación con Cooperativa.cl recordó parte de su paso por el desierto africano.

 

"Terminar el Dakar es lo máximo a lo que puede aspirar cualquier motociclista y para mí fue el mayor logro por un tema personal, en un tema interno, de voluntad, de conocerse los límites de cada uno, que hasta no vivirlos, uno no sabe como va a reaccionar. Fue una experiencia doble, por lo gratificante y por haberlo terminado, pero infernal también", dijo Levalle, quien recuerda entre risas dos hechos que para cualquier persona son sólo digno de una película.

 

"Hubo varias anécdotas. Quizás dos. La primera fue cuando llegué a las cinco de la mañana. Eran las dos de la mañana, y yo estaba sin agua en la moto, sin agua para tomar, estaba totalmente deshidratado, el motor estaba a punto de explotar, y pude seguir adelante porque pude cambiar agua por bencina, y pude llegar al final", rememoró el motociclista.

 

La segunda es sin duda más sabrosa: "Cuando pasaba por un poblado en Mauritania, donde habían como 200 personas que me agarraron a palos, a piedrazos y tuve que huir, y fue el minuto que anduve más rápido en la carrera: cuando escape de esa turba de gente", cuenta.

 

Lavalle recuerda que "eso lo ve siempre en las películas, o te lo cuentan, pero de repente te ves ante una cantidad de gente en un pueblo que está perdido en el desierto, con personas hostiles, tapados enteros, de piel oscura y con una mirada dura, por lo que les toca vivir".

 

Pese a la satisfacción de haber llegado a Dakar, el coordinador del De Gavardo Team recuerda que el recorrido se transforma en un infierno.

 

"Yo anduve en moto mucho tiempo, me prepare mucho y la verdad es que es una carrera infernal", explica.

 

"Yo afortunadamente pude terminar, pero con muchos problemas y viviendo un infierno cada día", añade.

 

El futuro del De Gavardo Team

 

Levalle, en su calidad de coordinador del De Gavardo Team, analiza a su equipo y adelanta planes para el conjunto de pilotos que corren bajo el alero del bicampeón mundial.

 

"Hemos trabajado hace un año y los objetivos se han ido cumpliendo. Para el resto del año 2006 hay dos metas que son tratar de que cada uno de los pilotos vaya a una fecha del Mundial. Después que Orly Terranova y Andrés Tamm vayan al Dakar 2007", adelantó Levalle.

 

"Luego vamos a empujar para que eso se pueda concretar, y ya para el próximo año tratar de correr con el máximo de pilotos el Mundial y luego buscar colocar más pilotos en el Dakar", añadió.

 

En relación a las posibilidades del equipo en el Patagonia-Atacama, Lavalle dijo que "los objetivos no se modifican después de la primera etapa".

 

"Tenemos tres pilotos de punta, que fueron los que terminaron más adelante y están entre los 10 primeros, pero era poco previsible que los que tenían menos experiencia tuvieran sus primeras perdidas en la ruta, pero los más veteranos anduvieron bien y las instrucciones eran salir tranquilo, no arriesgar nada y cumplieron. Estamos muy conformes con el resultado del equipo", dijo.

 

En la primera etapa, Francisco López, Andrés Tamm y el argentino Orly Terranova se ubicaron cuarto, quinto y noveno respectivamente, y se mantiene expectantes en el Rally Patagonia-Atacama, que este jueves tendrá su segunda fase cuando los pilots partan desde Neuquén rumbo a San Rafael, en un recorrido total de 799,40 kilómetros y una especial cronometrada de 653,37 kilómetros. (Cooperativa.cl)

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