Los pagos con este sistema ha aumentado en un 177 por ciento.
El presidente de la Asociación de Bancos, Jorge Awad, defendió los cambios en el sistema.
Hay casi 18 millones de tarjetas de débito habilitadas en Chile.
A pesar que la banca descartó que se esté privilegiando a las tarjetas de débito en desmedro de los cajeros automáticos para aumentar ingresos por comisiones, el uso de tarjetas de débito se ha triplicado desde 2009.
Como consignó La Segunda, el diputado Fuad Chahín (DC) comentó que "en este año de desaceleración, los bancos han aumentado sus utilidades en un 38 por ciento y por lo tanto, no hay ninguna razón económica para que no se invierta en mejores estándares de seguridad".
"Esa ha sido la excusa para disminuir la provisión de efectivo y obligar a los clientes a utilizar medios como Redcompra o las tarjetas de crédito, beneficiando así el monopolio de Transbank, propiedad de los mismos bancos", añadió.
Según datos de la Superintendencia de Bancos, en junio pasado habían casi 18 millones de tarjetas de débito habilitadas para hacer transacciones, casi quintuplicando a los 3,2 millones de plásticos vigentes para retirar dinero desde cajeros.
Esto indica que en los últimos cinco años, las tarjetas de débito han crecido en un 121 por ciento y las compras o pagos con este sistema han aumentado un 177 por ciento.
Sobre esto, el Superintendente de Bancos, Eric Parrado, comentó que se observa que "el sistema de cajeros se está ajustando. Hay una tendencia decreciente considerando que a principios de 2013 había cerca de nueve mil dispensadores y hoy ya hablamos de ocho mil, esas son decisiones asociadas más a aspectos comerciales de los bancos".
Respuesta de los bancos
El presidente la Asociación de Bancos, Jorge Awad, descartó la hipótesis del diputado Chahín, indicando que ahora existen cuatro formas de abastecer de efectivo a la gente: 8.162 cajeros automáticos, 22.328 corresponsalías, transferencias y pagos por internet, además de las sucursales de los bancos.
"Pregúntele a la señora Juanita como está de feliz con todo esto", indicó.
"Hay nuevas formas de vivir y las tarjetas son más seguras. Aquí nadie hace las cosas obligado, la gente en el mundo usa menos efectivo", precisó Awad.
