"Adán y Eva" presenta "un mundo donde enamorarse es la única ocupación".
El programa de la cadena Cuatro se estrena mañana martes.
La conductora afirma que "los desnudos están tratados de forma natural y elegante".
Expectación genera en España el estreno -anunciado para mañana martes- del reality show "Adán y Eva, regreso al paraíso", cuyos concursantes fueron trasladados a una isla desierta y deben convivir obligadamente desnudos.
"Hemos creado un mundo donde enamorarse es la única ocupación. Sólo hay una manera de abrir la puerta del paraíso: estar desnudo... del todo", dice el spot promocional del programa, que será emitido por la cadena Cuatro.
Casi mil personas se presentaron al casting del "dating show" y quedaron seleccionadas 35. De acuerdo a la animadora, Mónica Martínez, "los desnudos están tratados de forma natural y elegante".
"Es un programa divertidísimo y muy interesante. La sociedad española está preparada para lo que va a ver. El equipo ha hecho algo magnífico y saca planos muy naturales y elegantes en los que no muestra lo que hay, sino lo que se está contando. No creo que los desnudos provoquen una revolución", afirmó Martínez.
El tráiler dado a conocer este fin de semana muestra a los concursantes dándose masajes que se dan unos a otros, paseando a caballo, nadando, besándose e incluso teniendo las primeras discusiones.
La presentadora afirma que para los concursantes "ha sido una experiencia muy bonita. Muchos crecen con autoestima, sobre todo muchas mujeres llegan con autoestima por los suelos y se van con la moral por las nubes... Al final les cuesta hasta vestirse", señala.
Éste no es el primer reality show donde los concursantes se muestran "como vinieron al mundo". En 2013, Discovery Channel estrenó "Supervivencia al desnudo", donde un hombre y una mujer totalmente desconocidos debían sobrevivir durante 21 días en un lugar despoblado, sin agua, sin comida y sin ropa.
Ese mismo año la televisión pública de Dinamarca puso al aire un ciclo que generó un escándalo: un concurso en el que dos hombres evaluaban los cuerpos de dos mujeres desnudas mientras ellas se quedan calladas, lo que fue calificado como "el programa más sexista de la historia", consignó Clarín.
