YPF es controlada por el estado argentino tras expropiación de 51 por ciento de sus acciones.
Acuerdo generó protestas en Buenos Aires y Neuquén, por posibles daños medioambientales.
Yacimiento queda en el sector de Vaca Muerta y es vecino de varias comunidades mapuches.
La petrolera YPF, controlada por el Estado argentino tras la expropiación del 51 por ciento de las acciones a la española Repsol, y la estadounidense Chevron firmaron un acuerdo para el desarrollo de parte de la formación de hidrocarburos no convencionales de Vaca Muerta.
El acuerdo fue suscrito en Buenos Aires por el presidente de YPF, Miguel Galuccio, el titular de Chevron, John Watson, y el responsable de la estadounidense en las operaciones de exploración y producción en África y América latina, Ali Moshiri.
El acuerdo implica para Chevron un desembolso inicial de 1.240 millones de dólares y se anunció apenas un día después de que el gobierno de Cristina Fernández decretara una ventajosa normativa para los proyectos petroleros con inversiones mínimas de mil millones de dólares.
El convenio prevé la explotación conjunta de petróleo no convencional en una nueva área denominada General Enrique Mosconi, dentro del sector Loma La Lata Norte-Loma Campana, en la provincia argentina de Neuquén (suroeste), según informó YPF en un comunicado.
Protestas
El acuerdo generó protestas en Buenos Aires y en la ciudad de Neuquén, debido a los antecedentes de empresa contaminante que tiene Chevron y a que la zona de Vaca Muerta, que cubre 30 mil kilómetros cuadrados y se extiende por cuatro provincias de Argentina, es lugar de asentamiento de varias comunidades mapuches.
Aunque la zona de explotación forma parte de territorios estatales y no hay población que viva ahí, los manifestantes expresaron su preocupación por los daños medioambientales que se pueden provocar.
Chevron afrontó un millonario juicio en Ecuador por daños ambientales en la Amazonía hechos entre 1964 y 1990 por Texaco, compañía que fue adquirida posteriormente por Chevron.
