Fatales ataques terroristas contra dos mezquitas en Nueva Zelanda

Publicado:
| Periodista Digital: EFE

Al menos 49 personas murieron y otras 48 resultaron heridas en dos atentados en la ciudad de Christchurch.

Hay tres sospechosos detenidos, incluido un australiano.

"Esto solo puede ser descrito como un ataque terrorista", afirmó la primera ministra, Jacinda Ardern.

Fatales ataques terroristas contra dos mezquitas en Nueva Zelanda
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Uno de los tiroteos fue retransmitido en directo a través de las redes sociales por el asaltante.

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Al menos 49 personas murieron y otras 48 -incluidos niños- resultaron heridas en los ataques terroristas cometidos este viernes contra dos mezquitas en la ciudad de Christchurch, la mayor ciudad de la Isla Sur de Nueva Zelanda, confirmó hoy la Policía.

"Esto solo puede ser descrito como un ataque terrorista", dijo la primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, en una comparecencia retransmitida en directo desde Wellington, donde confirmó la detención de tres hombres y una mujer tras el ataque, uno de los cuales ya fue liberado.

Un total de 41 víctimas murieron en el tiroteo en la mezquita Al Noor, mientras que otros siete fallecieron en la de Linwood y otra persona fue declarada muerta en el hospital, tras un ataque ocurrido a primera hora que fue dirigido contra inmigrantes y musulmanes, según la Policía.

"Las heridas oscilan entre graves a leves. Son pacientes adicionales con heridas de bala presentados en otros centros de la comunidad", indicaron en un comunicado las autoridades sanitarias de Canterbury, la región donde se encuentra Christchurch.

Una docena de heridos tuvieron que ser operados de urgencia en el hospital.

El comisionado de la Policía neozelandesa, Mike Bush, confirmó en una comparecencia retransmitida en directo desde Wellington que la alerta continúa en su nivel máximo en todo el país.

Bush manifestó que han presentado cargos por asesinato contra uno de los detenidos, descrito como un hombre de cerca de 30 años que pasará mañana a disposición judicial.

De los otros tres detenidos, Bush indicó que dos de ellos estaban en posesión de armas y se investiga su implicación en el suceso mientras que la cuarta persona no tenía ninguna relación con el caso y ha sido puesta en libertad.

La primera ministra Ardern calificó el ataque de "extrema ideología y extrema violencia" y señaló que no tiene "precedentes" en Nueva Zelanda, un país que describió como diverso y abierto.

Ardern afirmó que los -inicialmente- cuatro detenidos estaban siendo interrogados por la policía, al tiempo que precisó que los sospechosos no estaban fichados y estaban "fuera del radar" de los servicios de inteligencia.

Los agentes encontraron artefactos explosivos en los vehículos de los detenidos.

Uno de los tiroteos fue retransmitido en directo a través de las redes sociales por el asaltante, que aparece con ropa militar dentro del centro de culto disparando a bocajarro a varias personas con un arma automática de la que cambió el cargador al menos dos veces.

En las redes sociales también circula un manifiesto de los asaltantes que incluiría calificativos peyorativos contra los musulmanes.

"Es claramente un supremacista blanco que ha planeado esto durante dos años", dijo un analista en seguridad a la emisora Radio New Zeland.

Las autoridades de Nueva Zelanda elevaron el nivel de alerta al máximo nivel tras el ataque y las fuerzas de seguridad han ordenado el cierre de todas las mezquitas del país por seguridad, mientras que todos los colegios y edificios públicos de Chrischurch también se encuentran clausurados.

Uno de los detenidos es australiano

Uno de los asaltantes fue identificado como Brenton Tarrant, un australiano originario del estado de Nueva Gales del Sur, según indicó una fuente policial australiana a la televisión TVNZ, lo que fue confirmado más tarde por el primer ministro de Australia, Scott Morrison, quien condenó el atentado armado.

"Puedo confirmar que un individuo que ha sido puesto bajo custodia, según he sido informado, nació en Australia", dijo Morrison que aseguró que las agencias de seguridad australianas colaboran en la investigación policial.

"Estamos horrorizados, consternados, indignados y condenamos absolutamente este ataque cometido hoy por un terrorista violento, extremista de derecha", añadió.

Tras el ataque, la primera ministra neozelandesa, Jacinda Ardern, afirmó que el asalto fue "un acto de violencia extraordinario y sin precedentes", en lo que calificó como "uno de los días más negros de Nueva Zelanda".

"Este tipo de violencia no tiene ningún sentido en Nueva Zelanda. Esto no es lo que somos", dijo Ardern en rueda de prensa.

Entre 300 y 500 personas se encontraban en el interior de una de las mezquitas

Entre 300 y 500 personas se encontraban en el interior de una de las mezquitas cuando un hombre con un arma automática disparó al menos una veintena de veces, de acuerdo con varios testigos, que situaron en una treintena el número de víctimas.

La Policía bloqueó el centro de la ciudad, situada en la Isla Sur neozelandesa, y ha llamado a la población a permanecer confinada en sus casas.

La Policía confirmó a las 17:57 hora local (01:57 hora chilena) que el bloqueo de las escuelas a lo largo de Christchurch se ha levantado. "Nos gustaría asegurar a los miembros del público que hay una gran presencia policial en la ciudad y la seguridad de la comunidad es nuestra prioridad", informó en Twitter.

Según un testigo, el asaltante llevaba casco, gafas y chaqueta militar, y utilizó un arma automática con la que realizó una veintena de disparos.

Equipo de críquet bangladesí escapa ileso

Entre los feligreses que se encontraban en la mezquita estaban varios miembros del equipo de cricket de Bangladesh, que mañana sábado tenía previsto disputar un encuentro contra Nueva Zelanda. El plantel escapó ileso.

"Nuestro equipo estaba de camino a la mezquita para celebrar la oración del viernes. El ataque ocurrió antes de que llegaran al lugar", dijo a Efe el director ejecutivo de la Junta de Críquet de Bangladesh, Nizamuddin Chowdhury.

El equipo, que se encontraba en Nueva Zelanda para disputar tres partidos contra la selección local, "está ahora de regreso al hotel y se han tomado medidas de seguridad", añadió.

El partido previsto para mañana entre los neozelandeses Blackcaps y los bangladesíes Tigers fue cancelado hasta que se garantice la seguridad de los jugadores, informó en un mensaje en Twitter el equipo neozelandés.

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