Jihad Diyab no ingiere alimentos desde hace un mes y en la última semana dejó de consumir líquidos.
Hoy perdió el conocimiento y tuvo que ser atendido por médicos.
Jihad Diyab llegó a Uruguay en diciembre de 2014 y exige ser trasladado a otro país para poder reunirse con su familia.
Jihad Diyab, uno de los seis ex reos del penal de Guantánamo acogidos por Uruguay, entró este miércoles en estado de inconsciencia tras desmayarse, por lo que recibió atención médica, algo a lo que se negaba desde este sábado, en medio de una huelga de hambre que se extiende ya por alrededor de un mes.
El refugiado sirio dejó de ingerir líquidos hace alrededor de una semana y exige, con su protesta, que los gobiernos de Uruguay y Estados Unidos intercedan para que se pueda reunir con su familia en otro país, de preferencia árabe.
Según informaron esta tarde los médicos que lo asistieron, Diyab entró en "coma superficial" y está en un estado de deshidratación, por lo que se le está suministrando suero fisiológico.
El "Grupo de Vigilia por Jihad Diyab", un colectivo de activistas cercano al refugiado, alertó hoy en redes sociales que éste había perdido el conocimiento y se encontraba bajo el cuidado de médicos.
Los galenos siguen el "protocolo médico que indica que si el paciente pierde el conocimiento, su doctor tiene la potestad de decidir por él qué medidas de urgencia tomar para salvarle la vida", indicó el grupo, detallando que a Diyab "lo estabilizaron y permanece con internación domiciliaria, por lo menos hasta nuevo aviso".
"Apelamos más que nunca a la solidaridad del pueblo uruguayo y a la solidaridad internacional. Su estado de salud empeora drásticamente", concluye el mensaje del grupo de apoyo a Diyab.
Gobierno "preocupado"
El vicecanciller de Uruguay, José Luis Cancela, afirmó hoy ante la prensa que el titular de la cartera, Rodolfo Nin Novoa, "está preocupado" por la situación del refugiado, por lo que está llevando adelante gestiones para alcanzar una solución.
Cancela afirmó que el canciller, actualmente en Nueva York, en preparación de la visita del presidente Tabaré Vázquez a la próxima Asamblea General de las Naciones Unidas, está procurando en el "más alto nivel" que otros países accedan a acoger a Diyab para satisfacer en lo posible sus reivindicaciones.
"Lamentablemente, hasta el momento no hemos tenido ninguna respuesta positiva", indicó Cancela.
El viernes pasado Diyab manifestó a la prensa que su salud es "precaria" y que responsabiliza "personalmente al Gobierno de Estados Unidos y también al de Uruguay" en el caso de fallecer.
Diyab abandonó el país a mediados de junio y a fines de julio se presentó en el Consulado uruguayo en Caracas, donde pidió ser trasladado a un tercer país distinto a Uruguay para reunirse con su familia, pero a la salida de dicha sede diplomática fue detenido por las autoridades venezolanas y deportado a Uruguay semanas después.
Junto a otros tres sirios, un tunecino y un palestino fueron acogidos en Uruguay en diciembre de 2014 como parte del compromiso del entonces presidente uruguayo José Mujica de colaborar con su par estadounidense, Barack Obama, en el plan de cierre del penal de Guantánamo.
