Lilian Tintori expuso al secretario general de la OEA la situación de "los presos políticos en Venezuela".
Le solicitó, además, "que interceda para lograr la libertad" del líder opositor, encarcelado hace un año.
Tintori concurrió al encuentro "acompañada de familiares de otros detenidos", informó la OEA.
El secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, se reunió este martes en Washington con Lilian Tintori, esposa del líder opositor venezolano encarcelado Leopoldo López, y expresó su rechazo a la autorización dada en Venezuela para que las Fuerzas Armadas puedan participar en el control de las manifestaciones.
Insulza recibió a Tintori -quien "pidió audiencia para exponerle las condiciones legales y jurídicas en que se inscriben los procesos de los presos políticos en Venezuela"- en su oficina en la sede de la Organización de los Estados Americanos (OEA), hasta donde ella acudió acompañada de familiares de otros detenidos, informó el organismo en un comunicado.
"Lilian Tintori pidió específicamente al secretario general Insulza que interceda para lograr la libertad de Leopoldo López, a quien, aseguró, solo lo guía el objetivo de lograr cambios dentro de los marcos constitucionales vigentes en su país", señaló la OEA.
López está recluido en una cárcel militar desde hace casi un año, cuando se entregó a las autoridades para hacer frente a cargos de instigación pública y otros supuestos delitos relacionados con hechos violentos registrados durante las protestas que vivió Venezuela en febrero de 2014.
Tintori, que ha visitado varios países exponiendo el caso de su esposo, entregó a Insulza "detalles de varios procesos abiertos contra dirigentes opositores" en Venezuela y denunció la falta de "debido proceso" en el caso de López, según el comunicado de la OEA.
Insulza "escuchó el relato de la esposa de López y ofreció poner los antecedentes en conocimiento de las instancias pertinentes de la Organización" que dirige.
Críticas a nuevo rol del Ejército
Además, el ex ministro del Interior expresó su "fuerte rechazo" a la recientemente aprobada "resolución 008610 del Ministerio del Poder Popular" para la Defensa de Venezuela, que transfiere a las Fuerzas Armadas la misión de controlar las manifestaciones masivas.
Ese tipo de medidas "sólo polarizan la situación interna venezolana y no colaboran en la búsqueda de puntos de encuentro en la dividida sociedad del país", afirmó Insulza, de acuerdo al comunicado.
La Oficina de Naciones Unidas para los Derechos Humanos también criticó hoy la resolución adoptada en enero por el Gobierno venezolano, que indica que las Fuerzas Armadas podrán aplicar el "método del uso de la fuerza potencialmente mortal" durante manifestaciones, cuando la situación lo requiera.
Durante su reunión de hoy, Insulza también reiteró "la urgencia de crear condiciones que abran espacios al diálogo nacional, lo que estimó responsabilidad tanto del Gobierno como de las fuerzas opositoras" en Venezuela.
