Educación 2020: Norma de calefacción en aulas está lejos de lo que se necesita

Ante las bajas temperaturas que se han registrado en la zona centro y sur del país, Educación 2020 analizó la actual normativa sobre la calefacción y la temperatura en las salas de clases.

El organismo indicó que según el Decreto 548, que data de 1989, señala que los espacios ocupados por estudiantes, salvo baños y patios, deben contar con 15º en educación parvularia y hogares estudiantiles y con 12º C en las aulas de educación básica y media.

Según añadió Educación 2020, Unesco indica que sobre los 19º es un ambiente "muy caluroso" y bajo los 7º, "muy frío", mientras que un espacio templado varía entre los 12 y 17 grados.

"Si comparamos nuestra normativa con la de otros países con iguales condiciones climáticas, nos encontramos muy distantes de lo que realmente se necesita", explicó Michelle Olgui, psicopedagoga del Centro de Liderazgo Educativo de Educación 2020.

"Con 12° el cuerpo se dispone en modo de conservación y es mucho más difícil poner atención o escribir. Por otro lado, si las estufas de las salas no son eléctricas, se consume el oxígeno y da sensación de somnolencia", añadió la experta.

En caso de no disponerse de las condiciones en los establecimientos para obtener las temperaturas, el Decreto 548 señala que éstas "deberán lograrse mediante estrategias pasivas, de lo contrario, con sistemas de calefacción, que posean ductos de evacuación de gases al exterior y protecciones para evitar quemaduras", es decir, estufas o calefactores.

En cuanto a la iluminación, el citado Decreto establece que todas las aulas contarán con ventanas que aseguren la luz natural, para alcanzar, mínimo, 180 lux en la cubierta de la mesa de niños, niñas y jóvenes. Esta medida puede complementarse con luz artificial.

Como referencia, Unesco recomienda 100 lux para los pasillos, 600 lux para una biblioteca y 250 lux para una sala de clases.

En caso de no existir las condiciones establecidas en la normativa para calefacción e iluminación en los colegios y liceos, las denuncias deben realizarse ante la Superintendencia de Educación.

"Como Superintendencia de Educación recibimos todas las denuncias que afecten la integridad de niños y niñas. Una sala de clases con infraestructura deficiente, con pisos húmedos, techumbres con filtraciones, puertas que no cierran o ventanales rotos, sin duda que no es apta -en términos de seguridad, humedad y frío-, para una educación de calidad", afirmó Ximena Bugueño, jefa de la División de Denuncias de la Superintendencia.

Durante 2014 la Superintendencia de Educación recibió 529 denuncias por infraestructura deficiente y en lo que va de 2015, 190. Estas denuncias, así como sus planes de fiscalización, "permiten la revisión de la normativa -para que efectivamente garantice la integridad en los colegios- y así contar con las provisiones adecuadas para una educación de calidad", agregó Bugueño.