"Corren el riesgo de estigmatizar a todo el pueblo mapuche y desacreditar su sana búsqueda de reconocimiento", aseguró monseñor Cristián Contreras.
La declaración se emitió en medio de la 111ª Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal de Chile.
Seis capillas han sido quemadas en la región.
La Conferencia Episcopal de Chile manifestó este viernes su rechazo a los atentados que se han producido en la Región de La Araucanía y que han destruido seis templos, asegurando que estos hechos "corren el riesgo de estigmatizar a todo el pueblo mapuche".
"Cuando no se respetan valores tan esenciales para la existencia de un pueblo creyente como son el derecho a la vida humana, su seguridad y sus espacios sagrados, se hiere el alma misma de este pueblo", afirmó el monseñor Cristián Contreras, secretario general de la Conferencia y obispo de Melipilla.
Tras esto, agregó que "estos hechos que son rechazados por la inmensa mayoría de la población, corren el riesgo de estigmatizar a todo el pueblo mapuche y desacreditar su sana búsqueda de reconocimiento y reparación".
Por último, indicó que "tan alarmante e incomprensible como lo anterior es la lentitud del Estado y sucesivos gobiernos en su deber de buscar soluciones eficaces a esta situación".
Las palabras del monseñor Contreras se emitieron en la 111ª Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal de Chile que se realiza en Punta de Tralca.
Son parte de una declaración de 10 puntos, titulada "Una sociedad justa, fraterna, desafío y tarea que a todos nos involucra", donde la Iglesia plantea su parecer sobre temas de contingencia como el sueldo ético, tema en el cual aseguran que seguirán promoviendo las mejores condiciones de vida de los chilenos.
También estuvo presente el obispo de Villarrica, Javier Stegmeier, a quien se le consultó sobre los atentados a los templos religiosos y confirmó una reunión para el próximo lunes con el obispo de Temuco, Héctor Vargas, y también con el intendente de La Araucanía, Andrés Jouannet.
"Hay una intención de un pequeño grupo violentista que como ya se ha dicho no representa el sentir de los mapuches, todo lo contrario, los mapuches quieren la paz, por lo tanto lo que pretende quizá este grupo que quema iglesias es lograr un ambiente de desestabilización y así causar este temor que hoy día estamos viviendo en la zona", dijo el religioso.
También se plantearon cuestionamientos a la ética pública y la relación entre el dinero y la política, apuntando a la transparencia.
Ezzati opinó sobre exhortación de Francisco
Otro de los temas tratados durante esta asamblea fue la exhortación apostólica del papa Francisco, donde se abrió la puerta a los divorciados que quieran volver a la iglesia católica.
El arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, explicó ante esto que "los divorciados vueltos a casar no son excomulgados de la iglesia, siguen siendo hijos de la iglesia".
"En segundo lugar, en virtud de su bautismo, los divorciados vueltos a casar tienen un campo abierto en la vida y en la misión de la iglesia, tiene todo un campo abierto en lo que significa la educación cristiana de los propios hijos", manifestó el líder de la Iglesia Católica chilena.
En el documento de más de 250 páginas el sumo pontífice le cerró la puerta al matrimonio homosexual, no obstante pidió a la iglesia en todo el mundo protección a las lesbianas y gays de la injusta discriminación.
Conflicto trabajadores de Atacama
En la instancia demás estuvo presente el obispo de Rancagua y vicepresidente de la Conferencia Episcopal, monseñor Alejandro Goic, quien se refirió la movilización de trabajadores públicos de Atacama.
En ese sentido, llamó al Gobierno a cumplir sus compromisos afirmando que "debiera hacerse el esfuerzo de satisfacer ese compromiso que en su momento fue dado. Siempre en estos temas tiene que haber una gran capacidad de diálogo, en este caso entre los trabajadores y quienes la responsabilidad de conducir esa empresa o esa sociedad".
