Renuncia de Raúl Guzmán a la Fiscalía abre interrogante por futuro del caso Maristas

Luego de que el jefe de la Fiscalía Regional Metropolitana Sur, Raúl Guzmán, concretara este miércoles su renuncia a la institución, tras ser ratificado como secretario general del Senado, surgió la interrogante acerca de qué pasará con la indagatoria del caso Maristas, sobre presuntos abusos sexuales contra menores al interior de la congregación, que le estaba asignada personalmente.

Desde el Ministerio Público aseguraron que se continuarán con las diligencias de la causa, sin embargo, los sobrevivientes piden que se reasigne al fiscal regional de O'Higgins, Emiliano Arias, que lleva el resto de los casos de abuso sexual eclesiástico.

Eneas Espinoza, uno de los denunciantes públicos de los abusos sexuales cometidos por religiosos al interior del Instituto Alonso de Ercilla, perteneciente a la congregación de los Hermanos Maristas, dijo que "sería lógico que esta causa quede en manos de quienes llevan la mega-causa de los abusos y el encubrimiento".

El sobreviviente explicó que "las redes que estos delincuentes tejían desde la congregación se enlazan con otras congregaciones y con otros casos en la interior de la Iglesia católica chilena".

"Cualquier demora, preocupa", enfatizó.

De acuerdo al último balance de la Fiscalía Nacional, a la fecha se da cuenta de 164 causas vigentes por presuntos abusos en la Iglesia, que involucran a 220 personas investigadas y a 246 víctimas, de las cuales la mitad son niños, niñas y adolescentes.

Con su renuncia este miércoles, Raúl Guzmán remitió todas las investigaciones que le estaban asignadas personalmente para que sean derivadas a otro fiscal regional o a su sucesor.

Guzmán rindió durante esta jornada una cuenta pública y, al término de ésta, presentó ante el fiscal nacional, Jorge Abbott, la dimisión, que se hará efectiva el 1 de mayo; un mes antes del fin de su periodo legal como fiscal regional.