Tras la caída de la avioneta que dejó un saldo de cuatro heridos, la tarde del sábado, la intendenta de la Región Metropolitana, Karla Rubilar, descartó el cierre del Aeródromo Tobalaba, ubicado en el límite de las comunas de La Reina y Peñalolén.
La máxima autoridad regional hizo hincapié en los errores de planificación urbana en torno a la ubicación del aeródromo y los accidentes que se han producido, pero señaló que el recinto es necesario.
"Pasamos de 100 mil viajes a 50 mil, y probablemente vamos a ir disminuyendo muchos más. Vamos a dejar en el Aeródromo de Tobalaba solamente los vuelos que sean necesarios y vamos a restringir los otros para llevarlos hasta Peldehue", señaló Rubilar.
"Vamos a tener un Peldehue abierto para el 2019, pero necesitamos del Aeródromo de Tobalaba, y esperamos restringir al máximo los vuelos que no correspondan en este sector", insistió.
"Este es un aeródromo que está desde 1954, si hay casas alrededor que están demasiado cerca, es porque no se planificó bien, y no es culpa del aeródromo, sino que, probablemente, de la mala planificación de la ciudad", puntualizó Rubilar.
Disminuir o sacar los vuelos
En tanto, la alcaldesa de Peñalolén, Carolina Leitao (DC), insistió en la necesidad de que los vuelos sean sacados del Aeródromo, dada la la urbanización del sector.
"Nosotros creemos que ésta es una zona ya habitada por todos los sectores, más el Parque de Pueblos Originarios. Es necesario disminuir o sacar los vuelos de este aeródromo y traladarlos hasta Peldehue, que es lo que se nos ha informado", enfatizó Leitao.
