Las denuncias en los primeros nueve meses del año se incrementaron un 8,6 por ciento.
Los robos a cajeros, en tanto, anotaron un alza del 152 por ciento.
El alza en los fraudes con tarjetas podría tener relación con el incremento de personas que las utilizan, dice el Ministerio Público.
El Ministerio Público dio a conocer este miércoles un informe en el que se reveló un aumento en los fraudes con tarjetas de crédito y en los robos a cajeros automáticos durante los primeros nueve meses de este 2014.
La información fue entregada por el director ejecutivo del Ministerio Público, Jorge Abbott, y el gerente de estudios de la Fiscalía Nacional, Claudio Ramírez, quienes señalaron que las denuncias por uso fraudulento de tarjetas de crédito aumentaron un 8,6 por ciento en comparación con el mismo periodo en 2013.
Además, indicaron que los robos a cajeros automáticos sufrieron un alza de 152 por ciento, es decir, 119 casos más que en el año anterior, según informó La Segunda.
El subdirector de Delitos Económicos de la Fiscalía Nacional, Alejandro Moreira, explicó que el aumento en los fraudes con tarjetas podría tener relación con el incremento de personas que las utilizan.
"Detectamos que también existe un modus operandi más refinado. Por ejemplo, con sujetos que captan los datos mediante una conexión inalámbrica. Son cosas que lamentablemente pueden aprender en foros o en YouTube", comentó.
La solución del chip
En este contexto Daniel Lobos, subinspector de la Brigada de Delitos Económicos de la PDI, afirmó que "se ha demostrado que en la medida que un país deja la banda magnética y adopta el chip, estas personas demoran en mudarse de tecnología para seguir cometiendo sus delitos".
Por esto, con la implementación del chip los casos de fraude podrían disminuir, sin embargo, "tampoco es infalible".
Además, se estima que aproximadamente en seis años podrían estar funcionando 100 por ciento en Chile.
De hecho, Brasil ya lo implementó, por lo que el aumento en fraudes con tarjetas podría tener alguna relación con la migración de los delincuentes a países sin chip.
