La víctima, de 14, fue ultimada con golpes de piedra en la cabeza.
El Ministerio Público aún no determina si lo acusará por homicidio o femicidio.
El asesino confeso, de 16 años, había tenido problemas con las drogas, relató su padre.
El joven de 16 años oriundo de Puerto Varas que confesó haber asesinado a su polola de 14 será formalizado el viernes en el Juzgado de Garantía de la ciudad.
El menor de edad compareció esta tarde ante el tribunal para la audiencia de control de detención, y el fiscal Naín Lamas solicitó ampliar el arresto por otras 24 horas, a la espera de reunir mayores antecedentes.
En la audiencia el defensor Felipe Ares solicitó calificar la detención como "ilegal", alegando que no fue reportada a la Defensoría Penal Pública. Esto fue negado por la Fiscalía, que afirmó haber hecho la notificación a través de WhatsApp.
En definitiva la jueza Paula Caico accedió al pedido de ampliar la detención y rechazó el alegato de la defensa, con lo cual la formalización quedó fijada para mañana.
El Ministerio Público aún no determina si lo acusará por el delito de homicidio o femicidio.
El asesinato se registró la noche del miércoles en un camino interior del fundo Las Cumbres. El joven golpeó a la víctima con una piedra en la cabeza, provocándole pérdida de masa encefálica. Según la PDI, el crimen estuvo motivado por los celos.
Malas influencias
El adolescente fue llevado al retén de Río Pescado por su propio padre, de nombre Víctor, quien tras la audiencia afirmó que su hijo tuvo problemas anteriores con la Justicia -incluso de consumo de drogas- porque se mezcló con "malas influencias".
Explicó que el menor estudió en la Escuela Horizonte de Río Pescado y actualmente no iba a clases. Tras la erupción del Volcán Calbuco estuvo albergado y luego vivió con su polola. Recién esta semana había regresado a su casa.
El progenitor relató que él estaba en un culto en una iglesia evangélica cuando llegó el adolescente para contarle lo ocurrido, pero sin decirle que la niña estaba muerta.
"Entra él, y me dice tres veces: 'Papito, perdóname'. Yo lo abrazo y le digo: 'Hijo, ¿qué pasó?', y me dice: 'Le pegué a la Tania, la golpeé (...) y quedó botada en el suelo, y yo me vine para que usted sepa", contó el padre, que dijo haber tenido un "presentimiento" de que algo malo había pasado. Por eso fue con el menor donde Carabineros.
Fue "cuando ya estábamos en el retén cuando nosotros dimos cuenta de que eso (el deceso) había pasado. No teníamos idea de que había fallecido la niña. Después de que fue la patrulla (policial), constató que estaba fallecida", explicó Víctor.
