El joven de 17 años capturado tras el ataque de ayer en Hualpén quedó sin medidas cautelares.
Su hermano, de 27, permanece detenido mientras se resuelve una apelación de la Fiscalía.
El imputado y su hermano son los presuntos responsables de atacar con fuego a un cajero de la sucursal de Servipag ubicada al interior de un supermercado en Hualpén.
El Juzgado de Garantía de Talcahuano dejó detenido sólo a uno de los dos presuntos responsables del ataque incendiario que afectó a un trabajador de Servipag en la comuna de Hualpén, en la Región del Biobío.
Si bien en un comienzo el fiscal José Orella pidió prisión preventiva para el mayor de los hermanos e internación provisoria para el menor de edad por robo con violencia calificado y homicidio frustrado, la magistrado rechazó las medidas cautelares, por considerar falta de evidencias.
Ello permitió apelar al Ministerio Público, en base a los prontuarios que ambos hermanos de 17 y 27 años -apodados "Los Pinto"- tenían a su haber.
Jorge Montecinos permanecerá detenido en el Centro de Reclusión Preventiva de Coronel durante los cuatro meses que durará la investigación, mientras que a su hermano menor I.M.P. se le coincidió libertad asistida especial por 18 meses.
El fiscal Orella señaló que "se le ingresó al mayor de edad, se encuentra en calidad de detenido, no es prisión preventiva, mientras se resuelve la apelación que nosotros interpusimos verbalmente. Técnicamente no está en prisión preventiva, claro, está privado de libertad, efectivamente eso es así".
"El menor de edad, en esta causa, quedó en libertad. No quedó sujeto a ninguna medida cautelar. La otra causa por la que venía privado de libertad por la orden de detención venía para un juicio de robo con intimidación, pero estábamos pidiendo 24 meses de libertad asistida especial. En definitiva, se le dieron 18", explicó.
Familia exigió justicia
Los familiares de la víctima del ataque incendiario, identificado como Pablo Ramírez, abandonaron las dependencias expresando su molestia con la decisión, apelando a que hechos como éste seguirán aconteciendo mientras no se determine una condena a los presuntos delincuentes.
Carolina Peña, esposa de la víctima, declaró que "por desgracia Pablo, mi marido, fue la primera víctima de un ataque salvaje, inhumano, descriteriado. Si la Justicia en Chile sigue como está, Pablo no va a ser el único, van a venir muchos más y eso es lo que yo exijo, justicia pero no de la boca para afuera".
"Quiero que a mi marido se le haga justicia como corresponde", indicó.
Mientras que la madre de Ramírez, Ana María Arias, confirmó a Cooperativa que su hijo permanecía en estado de coma inducido en el Hospital Clínico del Sur a la espera de ser trasladado a la Mutual de Seguridad de Santiago, lo cual se realizó durante la noche de este jueves.
El trabajador sigue grave y en riesgo vital internado en este último recinto.
