Seis puntos de comparación entre ambas opciones.
En el AVP no hay promesas de fidelidad y para separarse no es necesario acudir a un juez.
El contrato de AVP, al igual que el matrimonio, se necesita de un oficial del Registro Civil, por lo que no se pierde la ceremonia.
Aunque aún quedan trámites legislativos por superar, el actual proyecto Acuerdo de Vida en Pareja (AVP) fue aprobado este martes en la Sala del Senado. De seguir avanzado sin mayores cambios, el nuevo contrato implicaría seis ventajas por sobre el matrimonio.
La regulación de los bienes: "En general, en el matrimonio el sistema es sociedad conyugal y si los cónyuges lo resuelven el sistema es de separación de bienes. En el AVP, si usted nada dice, es separación de bienes y los convivientes civiles pueden establecer un régimen de comunidad", explicó el senador RN, Andrés Allamand.
Y agregó que, "en sociedad conyugal el marido administra los bienes del matrimonio y, además, los bienes de la mujer. En el AVP, los cónyuges son dueños mitad y mitad de los bienes que se adquieren desde el acuerdo", consignó Las Últimas Noticias.
No hay promesas de fidelidad: En el AVP sólo se "obliga a socorrer al otro, a tener una vida afectiva, pero no te obliga a tener hijos (...) Igual eso da un cierto margen de diferencia entre una institución y otra", señaló Fabiola Lathrop, investigadora del Centro de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Central.
Ceremonia: El contrato de AVP, al igual que el matrimonio, se necesita de un oficial del Registro Civil, el que incluso puede ir a la casa de los convivientes, por lo que no se pierde la solemnidad en la firma del contrato.
El proceso para disolver contrato es más corto: "Para terminar actualmente con el matrimonio hay que distinguir si se hace por divorcio o nulidad. En ambos casos hay que ir al juez y, dependiendo de si es divorcio o nulidad, hay distintos requisitos que cumplir", explicó Lathrop.
"En cambio, el AVP se puede disolver de común acuerdo o unilateralmente, sin ir al juez. Basta que uno exprese su voluntad ante un notario o ante un oficial del registro civil. Se salta más que un trámite, un procedimiento completo, una intervención judicial, audiencias a las que uno debe comparecer", agregó.
¿Una previa al matrimonio?: El senador Allamand explicó que "en Francia, el 30 por ciento de las parejas que tenían el AVP francés terminaban en matrimonio. O sea, mucha gente joven lo tomaba como una institución intermedia".
"Si usted quiere vivir con su novio y le parece que está en una etapa inicial de una relación, pero quiere tener un sistema de bienes, comprarse un auto juntos, qué sé yo, ahora tiene cómo hacerlo", detalló.
Herencia: Los derechos sucesorios quedan igual-igual al del cónyuge. "Si el AVP se disuelve con la muerte de uno de ellos, el conviviente va a suceder a la pareja que falleció, dependiendo si tienes hijos o no. Si el conviviente de la pareja tiene un hijo, se lleva lo mismo que el hijo", explicó la investigadora Fabiola Lathrop.
"Si tiene dos hijos, el conviviente lleva el doble de lo que lleva cada hijo. Tiene también derecho a adjudicación preferente de la vivienda familiar y una cuarta mínima garantizada de la herencia", subrayó.
