Sin embargo, los trabajadores aceptaron la propuesta de bajar a un 6,5 por ciento el reajuste público.
De no haber acuerdo, empleados fiscales no descartaron movilizaciones.
Jornada constituyó la séptima mesa de negociación.
Sin acuerdo entre trabajadores y el Ejecutivo terminó la mesa de negociación por el reajuste al sector público que deberá ser incorporado en el Presupuesto General de la Nación del próximo año.
A la reunión llegaron los representantes de los trabajadores y los ministros de Hacienda, Rodrigo Valdés y del Trabajo, Ximena Rincón.
Desde el Gobierno existe una negativa de subir el reajuste sobre el 3,5 por ciento ante el escenario económico que se prevé para el país.
Mientras que desde la vereda de los trabajadores señalaron que no bajarán más los porcentajes, y de no haber acuerdo no descartan movilizaciones.
La primera petición del sector público fue de un 8 por ciento, pero avanzadas las conversaciones aceptaron bajar nuevamente la propuesta inicial a un 6,8 por ciento.
A la salida del encuentro que duró cerca de cuatro horas, el coordinador de la mesa del sector público, Carlos Insunza, sostuvo que "si bien, todos entendemos que existe una situación económica más compleja de otros años, ha debido reconocer el ministro (de Hacienda) que el país no está en recesión, que la economía sigue creciendo".
Insunza agregó que "sin duda, las dificultades que hay hoy día a nivel del presupuesto fiscal son dificultades que en nuestra opinión no deben ser pagadas por los trabajadores y trabajadoras".
El dirigente enfatizó que "si el Gobierno pretende conducir el rejuste general en esa dirección, sin duda va a encontrarse con los trabajadores de frente y con las organizaciones que están aquí".
Por su parte, este lunes continúan las reuniones a partir de las 18:00 hrs debido a que el reajuste en el sector público deberá presentarse el próximo miércoles 25 de noviembre en el Congreso Nacional.
