El vicepresidente de la Fundación para la Superación de la Pobreza cuestionó en Cooperativa esta política social.
Los bonos "no resuelven temas de injusticia social", comentó.
Baranda manifestó que es necesario un cambio de las políticas sociales.
El vicepresidente de la Fundación para la Superación de la Pobreza, Benito Baranda, conversó en Lo que Queda del Día sobre la entrega del Bono Marzo, el que consideró como un gasto innecesario, ya que no va acompañado de otros cambios en las políticas de Gobierno.
Según planteó Baranda en Cooperativa, hace años que planteó que "los bonos, si se tomaban como prácticas dentro de la política pública, nos podían generar un gran daño porque comenzaban a absorber recursos que deberían estar destinados para acciones más contundentes de justicia. Si uno suma la cantidad de bonos que hemos entregado en los últimos cinco o seis años, de este tipo, superan los mil millones de dólares".
"Entonces uno dice 'si hubieramos tenido mil millones de dólares para hacer un plan bueno de inclusión social y laboral de jóvenes', donde Chile es el país que más jóvenes tiene inactivos en todo el continente podríamos haber avanzado con las familias extremadamente pobres y más vulnerables", agregó.
Baranda también cree que los bonos "facilitan los momentos cuando uno lo está pasando muy mal, pero no resuelven temas de injusticia social más profundos como son los salarios, la calidad educacional, la inclusión social y laboral de los jóvenes y los barrios que hemos creado tan segregados".
Finalmente, recalcó que "pueden ser una ayuda, pero esas familias tienen pocas personas en el mundo laboral, tienen una gran cantidad de jóvenes inactivos en nuestras poblaciones, entonces, es como el opio. Por supuesto las personas lo van a recibir, los subsidios también los reciben los ricos y también reciben beneficios y garantías de sus propias inversiones, pero todo eso puede terminar causando daño".
