Sus vacaciones en el lago Caburgua en el mes de febrero y un sobrevuelo por sectores afectados tras la erupción del Volcán Villarrica, en marzo, son las únicas dos veces en las que, durante su segundo mandato, la Presidenta Michelle Bachelet ha estado presente en la Región de La Araucanía.
Luego de haber asegurado a inicios de este mes que "pronto" concretaría un viaje de trabajo a la zona, se proyecta que a más tardar durante enero la Mandataria visite la zona para abordar problemáticas específicas de ésta.
De cara a ello, personeros tanto de la oposición como del oficialismo la llaman -con sus respectivos matices- a hacerse cargo de la situación de conflictividad y violencia que recurrentemente ocupa titulares en los medios de comunicación.
El ex ministro del Interior del Gobierno de Sebastián Piñera y actual presidente de la Fundación Avanza Chile, Andrés Chadwick (UDI), señaló como primera necesidad que Bachelet reconozca la existencia de "terrorismo" en la zona, algo que tanto el ex intendente Francisco Huenchumilla como su sucesor, Andrés Jouannet, han negado.
"En este Gobierno le tienen como un cierto temor a decir y a actuar en consecuencia, señalando que en La Araucanía hay violencia extremista, hay acciones terroristas; les cuesta mucho reconocer eso", dijo Chadwick.
"Si no se reconoce eso y se enreda (en) que son delincuentes comunes, que es robo de madera; el que no tiene claro que es violencia terrorista, es difícil que pueda ir avanzando en una solución de mayor seguridad para los ciudadanos", agregó el también ex parlamentario.
"Escuchar"
Por su parte, el senador PPD por la región, Eugenio Tuma, asegura que "la Presidenta Bachelet, lo que debería hacer es escuchar a los distintos sectores de La Araucanía: mapuche y no mapuche, escuchar a las víctimas de la violencia y luego establecer y corregir el diagnóstico que hasta ahora tiene el Gobierno, de que éste es un problema sólo de delincuencia común".
"No es un problema de delincuencia común, acá hay un tema que se está arrastrando por más de 130 años, que nunca, ningún Gobierno ha querido reconocer. El Gobierno tiene que hacer una reunión con todos los actores y recomendar un nuevo tratamiento", enfatizó.
Para el senador RN por la zona, Alberto Espina, "la gran deuda del Gobierno en esta materia es no avanzar nada en lo que es una propuesta por la paz social".
Tal "es un tema más amplio y que mientras no se aborde en su conjunto, sin prejuicio de actuar con toda dureza frente a los hechos de violencia, no vamos a tomar de raíz el problema que existe en La Araucanía, que tiene repercusiones mucho más profundas, pero el Gobierno se niega a encabezarlo", dijo Espina.
Entre tanto, ya está fijado que el próximo 7 de enero el ministro del Interior, Jorge Burgos (DC), junto con el subsecretario Mahmud Aleuy (PS), liderarán una reunión con fiscales, policías, jueces y políticos, para fijar lineamientos del actuar en la región.
