El Arzobispado resaltó que estos se retiraron de forma "pacífica" y dejando "absolutamente limpio y ordenado".
El Gobierno pedirá modificar la prisión preventiva de los comuneros y recalificar los delitos por la Ley Antiterrorista que se les imputa.
Ocho personas mantuvieron tomada durante nueve días la Catedral de Concepción.
Las ocho personas que mantenían tomada hace nueve días la Catedral de Concepción, en apoyo a los cuatro comuneros mapuche en huelga de hambre, terminaron este sábado la ocupación y se retiraron voluntaria y "pacíficamente" del templo dejándolo, incluso, "absolutamente limpio".
"Siendo las 11:30 horas de este sábado 30 de septiembre de 2017, se inició el proceso de retiro voluntario de los jóvenes que mantenían tomado" el templo, proceso que fue supervisado "por los sacristanes de la Catedral y en presencia del vocero (de los ocupantes) Juan Carlos Tralcal", informó el Arzobispado de Concepción en un comunicado.
La archidiócesis resaltó que "los ocupantes se retiraron pacíficamente, sin generar ningún tipo de daño durante el tiempo que permanecieron en el interior, dejando absolutamente limpio y ordenado el lugar".
Personal de Carabineros se constituyó a las 13:30 horas en las dependencias de la Catedral para constatar su desocupación, agrega el texto.
Además, el Arzobispado aseguró que se acordó que "posteriormente se procederá al retiro de una pancarta instalada por el grupo, en el frontis de la Catedral, para lo cual se requerirá de un equipo especializado por su altura".
En el comunicado se informa que las celebraciones litúrgicas en la Catedral se retomarán "con normalidad" a partir de este domingo.
Los ocupantes afirmaron estar "cumpliendo su palabra" al desocupar el templo, tras el gesto del Gobierno, que insistirá en la justicia para modificar la prisión preventiva de los comuneros mapuche que suman 116 días en huelga de hambre y confirmó que pedirá recalificar los delitos que se les imputa, es decir, pedirán no aplicar la Ley Antiterrorista.
"La toma se llevó a cabo desde lo que dijimos en un primer momento: mantenernos de manera indefinida hasta que los presos políticos en huelga de hambre tuvieran respuesta y dieran de baja la huelga. Ello ya se dio por lo menos de tres peñis", dijo el vocero de la toma, Juan Carlos Tralcal.
"Siempre llevamos un diálogo directo con el arzobispo Chomalí y gracias a ello se llevó aquí una manera de protesta inofensiva con respecto a otro tipo de protestas", añadió.
