El operativo policial para su captura se extendió por más de una hora.
Sujeto ya había sido condenado por el delito de robo.
ATON (Referencial)
Privado de libertad quedó un hombre de 30 años que tras verse acorralado por Carabineros intentó huir por los techos de varias casas ubicadas en el sector de Villa Magisterio en la ciudad de Arica. Su frenética fuga lo llevó a una morada sin ocupantes donde terminó escondiéndose en un closet cuyo dueño resultó ser un fiscal de Ministerio Público.
A eso de las 10:00 de la mañana de ayer la llamada de una mujer alertó a Carabineros sobre un robo al interior de una vivienda, al llegar hasta el lugar los efectivos policiales encontraron al delincuente al interior del dormitorio matrimonial. El sujeto huyó de la morada escalando por el muro de la casa colindante y dándose a la fuga saltando por los techos de varias viviendas.
Operativo
La detención del sujeto implicó una hora de procedimiento policial, según lo informado por el subcomisario de la Primera Comisaria de Arica, capitán Cristian Rebolledo, "realizamos un plan candado en toda la cuadra con los distintos dispositivos y empezamos a buscar entre los techos de las casas las cuales muchas se encontraban sin moradores" comentó el capitán a La Estrella de Arica.
Tras la extensa búsqueda uno de los motoristas de Carabineros se devolvió, "la intuición policial de este funcionario lo llevó a ingresar a otro domicilio donde no habían muchos muebles, debido a que sus moradores recién se estaban cambiando, entró a un dormitorio y había un closet pequeño y al momento de abrirlo estaba escondido el sujeto y se procedió a su detención" declaró el oficial.
La vivienda, en que su desenfrenada huida terminó, resultó ser de un fiscal del Ministerio Publico quien se enteró de lo ocurrido cuando estaba tomando audiencia en el Tribunal de Garantía, afortunadamente el inmueble se encontraba deshabitado.
Formalización
El imputado es Cristopher Medina Sepúlveda, quien el 22 de octubre de este año accedió al beneficio de libertad vigilada al estar cumpliendo una condena de cinco años por los delitos de robo con intimidación y robo con fuerza en vivienda, pero ahora volvió a estar privado de libertad.
El fiscal Mario Concha formalizó al sujeto por dos delitos de robo, uno de ellos de robo frutado. El imputado quedó con la medidas cautelar de prisión preventiva en la cárcel de Acha tras fijarse un plazo de investigación de 90 días.
