Clama por conectarse con el territorio nacional y acusa abandono por parte del Estado chileno. Ésa es la situación de la localidad Paso El León, una pequeña comunidad fronteriza con Argentina, en medio de la Cordillera de Los Andes, en la Región de Los Lagos.
La conforman 80 familias y el 50 por ciento de la población son adultos mayores; no hay jóvenes y adolescentes, excepto 13 niños que asisten a una escuela unidocente que tiene hasta sexto año básico.
El resto de su población emigró de la zona por las nulas posibilidades de seguir creciendo debido al aislamiento. Inciden también los problemas para encontrar locomoción y las duras condiciones climáticas, que requieren ser óptimas para permitir los viajes.
Para llegar a Río Puelo, la capital de la comuna de Cochamó -a la que pertenecen administrativamente-, sus habitantes demoran tres días a caballo, o bien pueden salir por el sector de Río Manso, cruzar la frontera y pasar por Argentina, en un viaje que -dependiendo donde viva el vecino- puede durar al menos tres o cuatro días.
Pacientes han muerto por no tener un camino
Patricia Montero, técnico paramédico que trabaja en el Paso El León, ha sido testigo de cómo pacientes han muerto por no tener un camino, mientras otros se han salvado tras presionar por ayuda a través de los medios de comunicación para que la autoridades reaccionen.
"El invierno es dificil acá, porque se pone muy feo abajo la pasada del Lago Tagua-Tagua, los helicópteros a veces hacen intentos de entrar y se devuelven, no vienen nomás, no llegan, entonces la persona que está grave, que necesita ser intervenida con urgencia, muere acá", lamenta la profesional.
"También tenemos el impedimento del río para cruzar hacia Argentina, en ese río sube mucho el caudal y trae muchos palos, madera gruesa de Argentina, y no se puede cruzar en bote", narra la Montero.
"La persona más alejada"
Javier Calixto, habitante y dirigente vecinal del sector Torrentoso, pide para la zona "un camino más accesible".
"Yo soy la persona más alejada del lugar, estoy a 35 kilómetros del camino que está en el (Río) Manso, cinco o seis horas a caballo", explica.
Actualmente trabaja junto a otros dirigentes en una organización para demandar mejor conectividad. Consultado sobre si cree que se concretará, responde: "Cuando uno empieza algo lo empieza para terminarlo y ojalá lo podamos terminar, que se pueda lograr".
Ruta se concretará en 18 ó 20 años más
Roberto Hagemann, empresario ligado al rubro minero e inmobiliario que llegó hace año a la zona, tras comprar la Hacienda Pucheguín, de 1.300 hectáreas, con fines comerciales, considera que para efectuar su trabajo y apoyar a la comunidad se necesita el camino; tarea que se propusieron realizar a partir del año 2008.
El encargado de la contrucción de dicha ruta, Ricardo Cortés, señaló que hace seis años, "en 2011, inclusive, nos juntamos con autoridades chilenas y autoridades argentinas en la Escuela 92 que está acá, bastante cerca, en un gran compromiso binacional para tirar esto para adelante, sacar esto adelante".
En dicho compromiso, continúa Cortés, "los argentinos también se involucran pensando en que este camino, este corredor binacional, a ellos les favorece mucho".
"Sabemos cómo funciona el tema de los argentinos hacia Chile, les gusta mucho, les es muy conveniente", dijo.
Pese a todo, el Estado de Chile sólo ha respondido que tiene los recursos para el estudio de un camino, y que esta ruta no se concretaría hasta 18 ó 20 años más; tiempo en que la situación, sin dudas, se agravará para los colonos que viven en la enclavada zona.
