Luis Vivar apuñaló a su mujer en enero pasado, en el sector de Alerce.
Madre del hombre justificó la agresión en contra de la joven porque se rio de él en su cara.
El tribunal ordenó prisión preventiva para Luis Vivar.
En prisión preventiva quedó Luis Vivar, sujeto acusado de femicidio frustrado en contra de su pareja en enero de este año, en el sector de Alerce, comuna de Puerto Montt, lugar donde apuñaló a la joven en la zona torácica dejándola con una lesión de carácter grave en uno de sus pulmones.
La mañana de este viernes el fiscal Patricio Llancamán confirmó que el sujeto, apodado "el Pillo Vera", quedó en prisión preventiva por los 70 días que se prolongue la investigación.
El persecutor explicó que "se tuvo que hacer un despliegue bastante importante para lograr la captura de este individuo hasta que dimos con él en Santiago, en una diligencia del OS-9".
En tanto, Isabel Artigas, madre de la joven agredida, dijo que había una constante violencia en su hogar hasta que se separó de Vivar. "Había torturas en su casa, y en el 2015 ella llegó a mi casa víctima de violencia y se detuvo al hombre, y luego quedó con orden de alejamiento", explicó la mujer.
La madre de la joven remarcó que Luis Vivar nunca ha mostrado arrepentimiento por su actitud y que "hay audios donde siempre la ha amenazado, y él la amenazaba con matar a su hija si no iba a juntarse con ella. Los audios están".
Madre del agresor protegió a su hijo
A su vez, la madre del agresor, María Elena Mansilla, reconoció que ella protegió a su hijo en este tiempo que estuvo prófugo de la justicia. "No lo niego, él es mi hijo y tenía que protegerlo tal como lo protegí nueve meses cuando estuvo adentro de mi panza".
Mansilla añadió que el día que ocurrió la agresión la joven se rio en su cara y explicó que "mi hijo le preguntó 'Francisca, tú tienes a otro, dime la verdad', y ella se rió" y ahí él "de impotencia" la apuñaló.
Luis Vivar fue detenido por personal de Carabineros del OS-9 en Santiago el pasado lunes, mientras trabajaba como gasfíter en una empresa capitalina y fue derivado a la cárcel de Osorno para evitar que fuera agredido en Puerto Montt, porque, según su defensa, había recibido amenazas.
