Obispo Carlos Pellegrín dijo que se indagará y se remitirán antecedentes a la Congregación para la Doctrina de la Fe.
Esta es la tercera denuncia interna, en tanto la Fiscalía abrió cuatro carpetas investigativas.
Obispo entregó la información este miércoles en conferencia de prensa.
El obispo de la Diócesis de Chillán, Carlos Pellegrín, informó que se abrió una tercera investigación contra un miembro de su jurisdicción: se trata del vicario parroquial de la parroquia del Buen Pastor, Ricardo Montenegro, quien fue acusado de presunto abuso sexual contra menores.
"A partir de hoy día, el padre Ricardo Montenegro va a estar suspendido del ejercicio sacerdotal, mientras sigue la investigación previa", dijo el obispo Pellegrin, agregando que los hechos denunciados ocurrieron supuestamente en la década de los 80', cuando el sacerdote acusado era vicario.
El obispo manifestó que la denuncia la recibieron el 23 de julio, y que en principio "no se informó a la Fiscalía porque no había menores involucrados, pero ahora se informó que sí estan involucrados, se hace público y se informará al Ministerio Público".
Además, por instructivo de la Conferencia Episcopal, se remitirán los antecedentes a la Congregación para la Doctrina de la Fe.
Investigaciones
Esta es la tercera investigación que abre desde junio la Diócesis de Chillán. El primero fue Héctor Bravo, cuya denuncia fue desestimada por el cura encargado de indagarlo, ya que no encontró "certeza moral" respecto a la verosimilitud de los hechos denunciados.
El segundo investigado, y del cual se declaró "verosímil" el relato denunciado, es el sacerdote Renato Toro Medina, quien cumplió sanción entre 2012 y 2015 por abusar de un sacristán.
Paralelamente, la Fiscalía local de Chillán lleva adelante cuatro investigaciones contra sacerdotes; dos de ellos son Renato Toro y Héctor Bravo; no obstante, se desconocen hasta ahora los nombres de los dos curas restantes que están siendo indagados.
