Son 43 los volcanes en todo Chile que son monitoreados en la red de vigilancia volcánica del Servicio Nacional de Geología y Minería.
Pero, según denunciaron las autoridades del Ministerio de Minería y de Sernageomin, desconocidos robaron el pasado 10 de septiembre los equipos instalados en las dos estaciones sismológicas del volcán Irrupuntuncu, en la comuna de Pica, Región de Tarapacá.
Con ello, el mencionado volcán quedó fuera de la red de monitoreo del Observatorio Volcanológico de Los Andes del Sur (OVDAS). El equipamiento está avaluado en más de 12 millones de pesos y debía permanecer allí por las próximas dos décadas, que es la estimación de la vida útil de esta tecnología.
Las estaciones del Irrupuntuncu quedaron sólo con un sismógrafo, la estructura y las cajas de protección violadas, pero sin cables, radios, baterías ni paneles de energía solar.
La ministra de Minería, Aurora Williams, indicó que "esto afecta la seguridad, especialmente en materia de desastres naturales, lo que genera un menoscabo importante con las comunidades que se encuentran en su entorno".
"Nuestro llamado es a resguardar esta infraestructura a quienes realizan estas sustracciones a que la devuelvan, porque la verdad es que no existe un uso alternativo en nuestro país. Esto afecta un objetivo importante que es la gestión de desastres naturales", declaró.
Otros robos
Este robo se suma a los ocurridos entre 2009 y 2013 donde también se registraron sustracciones en las estaciones sismológicas de los volcanes Chaitén, Llaima, Copahue, Láscar y Callaqui. Se consideran hechos aislados que no reportarían muchas ganancias a los delincuentes, ya que el equipo no tiene otro uso como para ser revendido.
El director nacional del Sernageomin, Rodrigo Álvarez Seguel, dijo que "estos son instrumentos que tienen un valor del orden a los 12 millones de pesos. No es un gran monto, pero sí lo complejo para nosotros es volver a instalarlos".
"Estamos hablando que estamos s 5.000 metros, tenemos un buen nivel de vigilancia volcánica con cámaras, con equipos de medición de temblores. La situación que se dio en 2009 en Chaitén no se va volver a repetir, pero todo este esfuerzo que se hizo hay que cuidarlo.
El organismo planifica ahora la forma de reponer el equipo de las estaciones lo más pronto posible para restablecer la vigilancia, que se hará indirectamente a través de la instalación ubicada en el volcán Olca, a 26 kilómetros de la estación original.
