Su cultivo se concentra en el secano maulino, donde sus productores están siendo asesorados.
El consejero regional Alexis Sepúlveda valoró la iniciativa que busca posicionar la cepa.
La cepa que llegó al país en 1939, fue dejada de lado por no dar resultados en ese momento.
Dentro del marco del Día Nacional del Vino, la Universidad de Talca, junto al gobierno regional del Maule, Corfo y la Corporación Regional de Desarrollo Productivo presentaron un proyecto que busca la denominación de origen para la cepa terroir Carignan.
La cepa Carignan llegó a nuestro país después del terremoto de Chillán de 1939, momento en el que el cultivo de esta cepa no dio buenos resultados, por lo que se dejó de lado en la producción vitivinícola.
En la actualidad, su cultivo se concentra en el secano maulino, a cargo de un grupo de productores que están siendo asesorados para optimizar los resultados del vino.
Alexis Sepúlveda, consejero regional del Maule, explicó que "el Carignan puede ser una fuente de oportunidades para nuestros pequeños productores, (se trata de) una viña que estaba abandonada, dejada de lado, que hoy día adquiere un tremendo valor producto, no solamente de la calidad, sino también de todo el entorno que significa producir el Carignan en el secano de la Región del Maule".
"Esta es una iniciativa muy potente que se enmarca en el trabajo que está haciendo el Gobierno", agregó.
Las viñas que actualmente están trabajando esta cepa han llegado a mercados internacionales, buscando posicionar esta cepa como uno de los principales de origen de nuestro país.
