Felipe Osiadacz y Fernando Candia estarán en un centro de detención de inmigrantes indocumentados hasta que se regularice la situación de su visa.
Los jóvenes, además, deberán esperar la apelación presentada por parte de la Fiscalía.
Tras un largo juicio en que los chilenos arriesgaban incluso la pena de muerte, el tribunal determinó condenarlos a dos años de prisión.
Felipe Osiadacz y Fernando Candia, detenidos en Malasia por el homicidio de una mujer trans de ese país, no fueron liberados hoy martes como se esperaba, a pesar de que durante esta jornada terminaron de cumplir la sentencia dictada hace tres semanas, y continuarán privados de libertad hasta que se regularice su situación migratoria.
Según informó esta madrugada la corresponsal de Cooperativa en Kuala Lumpur, Inés Rigal, los jóvenes van a estar en un centro de detención de inmigrantes indocumentados hasta que logren obtener la visa.
"Como su visado aún no estaba en regla -ya que fue ayer cuando les devolvieron el pasaporte para que pudieran tramitarlo- han debido ser sacados de prisión y han sido trasladados a un centro de atención de inmigrantes ilegales cerca de la prisión en la que estaban, a las afueras de Kuala Lumpur", explicó al trasnoche de Cooperativa.
La periodista detalló que denuncias de organizaciones de derechos humanos dan cuenta que las condiciones de salubridad, de acceso a agua potable, de dieta en dicha cárcel "son muy malas" y "peores" que en la prisión en que cumplían condena los chilenos previamente.
Allí, además, deberán esperar la apelación presentada por parte de la Fiscalía para ver qué ocurre con su sentencia.
Una vez que obtengan la visa, y hasta que no tengan una nueva sentencia, ellos pueden vivir el proceso de apelación fuera de la cárcel, pero dentro del territorio malasio.
La defensa de los dos chilenos había confirmado que lo más probable era que los jóvenes salieran este martes 4 de diciembre.
Tras un largo juicio en que los chilenos arriesgaban incluso la pena de muerte, el tribunal determinó condenarlos a dos años de prisión, lo que fue descontado de los meses que ya habían cumplido dentro de la cárcel.
La corresponsal ilustró hasta qué punto llega la desinformación de los chilenos respecto al proceso judicial: "Felipe nos ha hablado desde dentro del furgón y nos ha preguntado qué pasó ayer en la audiencia, que fue cuando les entregaron los pasaportes de vuelta a los embajadores" de Chile y España (Osiadacz cuenta con la doble nacionalidad chilena-española).
"Ellos hoy han sido trasladados sin saber exactamente en qué punto está su proceso", describió.
