La autoridad sanitaria detectó una serie de falencias que ponen en riesgo a los funcionarios.
Desde la alcaldía admiten las falencias, pero las atribuyen a la falta de recursos.
Por representar un peligro para sus trabajadores y sus familias, la Seremi de Salud de Atacama prohibió el funcionamiento de la unidad de control de plagas del municipio de Copiapó.
La seremi Lilian Sandoval explicó a TVN Red Atacama que lo más grave de todo es que el mismo baño utilizado para lavar los implementos con plaguicidas era usado por las personas de forma habitual, produciéndose una contaminación cruzada.
Otra de las falencias detectadas señala que el vehículo que transportaba el plaguicida era el mismo que usa la veterinaria para el traslado de animales.
Úrsula Pacheco, veterinaria y encargada de la Unidad de Higiene Ambiental del municipio, comentó que las falencias habían sido advertidas, pero por falta de recursos no se habían podido subsanar.
El proceso se está llevando adelante ahora para regularizar el funcionamiento de la unidad.
