La catástrofe puso a prueba a las empresas frente al colapso de Internet.
Expertos analizaron el desempeño durante la jornada.
Los celulares fueron ocupados por los usuarios en el norte.
El terremoto de 8.2 grados Richter que afectó al norte de Chile puso a prueba el desempeño de la tecnología móvil, el uso de los usuarios y el valor de las redes sociales en este tipo de eventos.
Con el terremoto de 8.8 grados Richter del 27 de febrero de 2010 como enseñanza, las empresas más importantes de telefonía móvil de Chile adoptaron una serie de medidas para la zona afectada hasta que se reestablezca la normalidad, como la habilitación del servicio impago de los usuarios, la liberación de teléfonos públicos para hacer llamadas nacionales y recargas de mensajes de texto para la comunicación.
De acuerdo a Andrés Wallis, Director de Asuntos Corporativos de Movistar, afirmó a Cooperativa que "aprendimos las lecciones, en 2010 no ocurrieron las cosas como esperábamos... las decisiones que tomamos ahora estaban pensadas desde antes y sólo había que dar la instrucción".
Por su parte, Isabel De Gregorio, Gerente de Asuntos Corporativos de Claro Chile, explicó a Cooperativa que "en las primeras horas no registramos caídas de servicio, pero sí notamos una alta congestión por intentos de llamadas. Tenemos un 75% de nuestra red habilitada y el resto se irán levantando con el reestableciendo de la energía eléctrica".
Alejandro Barros, experto en desarrollo digital, afirmó que la postura tomada por las empresas demuestra un avance. "Hay una aprendizaje con lo ocurrido en el norte. En 2010 Chile no se vio, para efectos de Internet, por cerca de tres horas. Y eso no fue por un problema de estructura de red, sino por operación. No hubo interconexión entre distintos ISP o más bien fue débil", dijo.
Algo que también destaca Hugo Morales, analista de tecnología. Según él, "hubo un refuerzo en los planes de contingencia de cada uno de los operadores móviles que en febrero de 2010 simplemente no dieron el ancho. Esta vez se notó que estaban mucho más preparados. La experiencia de Chile puede servir a otros países para saber cómo reaccionar".
Uso de los dispositivos móviles y redes sociales
Los dispositivos móviles juegan un doble rol en este tipo de instancias, según Morales. "Nos permiten registrar lo sucedido, con fotografías y videos, y también comunicarnos con la gente que nos importa", dijo.
Twitter y Facebook fueron las redes sociales usadas por los usuarios para entregar y recibir información. Una herramienta que "se usó mucho en el evento y permitió que circulara mucho más rápida la información", afirmó Barros.
Y agregó: "El problema que tiene es que tienes información que circula de manera correcta e incorrecta... habían imágenes que no eran en Chile e información sobre olas en Pisagua de 8,4 metros, cosa que no tenía nada que ver con la realidad".
Por su parte, Morales expresó que "cuando ocurre algo impactante, hay gente que trata de sacar partido a eso... lo idea es confiar en fuentes oficiales. Algo que suena demasiado sensacionalista es muy probable que ni siquiera esté ocurriendo".
"En este tipo de eventos las redes de voz colapsan muy rápido porque las personas quieren hablar con todo el mundo", expresó Barros, además de decir que "las redes sociales son asincrónicas. El contacto vía voz es síncrono, es decir, necesitas a alguien que te conteste al otro lado".
Sugerencias para el futuro
Muchas personas mostraron imágenes con la llegada de SMS por parte de SHOA y Onemi alertando sobre el tsunami. Aunque la herramienta fue aplaudida por los usuarios, el aviso sólo está disponible para ciertos dispositivos.
"Por ejemplo, en iPhone no funciona, sólo en Android en general y la población no sólo tiene ese sistema operativo. Ahí hay una promesa no cumplida", dijo Barros, mientras que Morales expresó que "sólo los equipos compatibles pueden recibir el mensaje".
Ambos expertos también reflexionaron sobre eventuales eventos de este tipo que podrían ocurrir y las medidas que debe adoptar la ciudadanía.
Barros dijo que "cuando hay una infraestructura crítica, los especialistas en desastres piensan en agua potable, energía eléctrica y carreteras, y se les olvida Internet y algunas redes de comunicación de datos".
Y agregó: "Eché de menos una promesa que hubo en 2010, de que lo canales entregaran información a través de una banda bajo la pantalla, como ocurre en Japón".
"Hay que buscar fórmulas para seguir mejorando el servicio. No fue mala la reacción, siempre se puede perfeccionar", expresó Morales.
Ante hechos como éste, la primera opción que se puede optar es el uso de mensajería instantánea. "El SMS es la forma de comunicación más eficiente en este tipos de casos, porque exige al mínimo la antena y no se sobresatura en demasía. Cuando uno llama exige más, cuando uno navega por Internet exige más", declaró.
Finalmente, Morales aconsejó el uso de cargadores solares y mecánicos para celulares. "Es una buena recomendación tener uno de esos para poder tener el celular conectado, pues muchos tienen radio, y si no hay energía eléctrica, puedes tener la posibilidad de escuchar la información que se entregue", expresó.
