La compañía acusó bloqueos y barricadas en la ruta de acceso a la faena, además de amenazas a contratistas.
Anunció que "interpondrá las acciones legales pertinentes".
Los trabajadores rechazaron las acusaciones realizadas por la empresa.
Minera Escondida denunció incidentes violentos protagonizados por los trabajadores en huelga del Sindicato N°1 -movilización que este lunes cumple su quinto día- por los que anunció que interpondrá acciones legales.
La compañía denuncia que ha habido bloqueos y barricadas tanto en la ruta de acceso a la faena como en su interior, la participación de sólo 19 trabajadores -de un total de 40- para cumplir con los denominados "servicios mínimos" y la supuesta amenaza a contratistas por encapuchados en el campamento Villa Cerros Alegres.
"Rechazamos de manera categórica estos actos, ya que no sólo atentan contra los valores de la empresa, sino que también infringen la ley y ponen en riesgo la seguridad de nuestra gente", dijo Patricio Vilaplana, vicepresidente de Asuntos Corporativos.
"La compañía hará uso de todos los recursos que sean necesarios e interpondrá las acciones legales pertinentes para garantizar la seguridad de todos los trabajadores en nuestra faena", añadió el ejecutivo.
Respuesta de los trabajadores
Ante los incidentes, que provocaron la interrupción del suministro eléctrico y la imposibilidad de utilizar las cámaras de vigilancia, el presidente del sindicato, Patricio Tapia, afirmó que los trabajadores de la productora de cobre más grande del mundo no han cometido negligencias.
"Nosotros mandamos 10 (trabajadores) y creemos que con 10 funciona, no con 40, la faena está detenida y con la gente tiene implementada dentro de la empresa bastan 10 de nuestros asociados. Si a nosotros Tribunales nos dicen que tenemos que pasar más gente la vamos a pasar", sostuvo el dirigente.
"Solamente revisamos que todo vaya bien, no hemos tapado ningún acceso, todos los días entran a robar y lo único que hacemos en distintos puntos es verificar que no entre gente, porque si entra gente a robar nos van a echar la culpa a nosotros", agregó Tapia.
Gobierno descartó nueva intervención
La movilización, que involucra a 2.500 funcionarios, comenzó el pasado jueves, tras el fracaso de los buenos oficios de la Dirección del Trabajo, negociación en la que el Gobierno fue mediador, pero no logró detener la huelga.
Al respecto, el subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy, comentó que "el Gobierno ya intermedió en el período que hay de buenos oficios, entiendo que están pidiendo un bono de 25 millones (de pesos), la empresa está ofreciendo nueve, y me imagino que las instancias laborales que correspondan permitirán que eso se resuelva".
Desde el sindicato exigen una modificación de los horarios de trabajo, beneficios equitativos para trabajadores antiguos y nuevos, un reajuste del 7 por ciento de los salarios y un bono de 25 millones de pesos por término de conflicto.
