Consejos para elegir el cepillo dental adecuado

Para mantener sus dientes y encías sanos, es vital tener una buena técnica de cepillado.

La doctora Patricia Calvache, directora de Clínicas Dentimagen, señaló que el cepillo que se elija debe cumplir con ciertas características esenciales para que la limpieza dedicada no sea en vano.

Entre las recomendaciones que entrega Calvache están las siguientes:

• Elije siempre un cepillo dental de textura mediana o suave. Uno duro podría dañar sus encías si no lo usa correctamente.

• Fijarse que el cabezal del cepillo sea lo suficientemente estrecho para acceder a la parte posterior de la boca.

• Respecto al tipo de mango, filamentos y cabeza, lo más importante es que a uno le quede cómodo para manipularlo y llegar con facilidad a todos los dientes.

• Los cepillos interdentales son ideales para limpiar espacios especialmente anchos o estrechos entre los dientes, para quienes tienen implantes y para los que sufren de encías recogidas.

• Si se está en tratamiento con frenillos, los cepillos de ortodoncia tienen un espacio en el centro para proteger los brackets.

• Los niños deben usar cepillo desde los dos años y además un adulto debe "supervisar" la higiene. Los cepillos infantiles son de colores y tienen dibujos para haceros más entretenidos y fomentar su uso.

• Es importante cambiar el cepillo dental si usted estuvo resfriado, ya que los gérmenes se acumulan en los filamentos, pudiendo ocasionar una nueva infección.

• Un cepillo gastado no limpia igual que uno en buen estado. Cámbielo apenas se empiecen a gastar los filamentos o cada tres meses.

Aunque es un síntoma que puede estar asociado a factores de temperatura o a manifestaciones del sistema nervioso, la sensación de sequedad entre los labios puede esconder la existencia de trastornos más serios y que ponen en peligro la salud de los dientes.

Calvache indicó que, pese a que se trata de una alteración que se manifiesta preferentemente en la población mayor de 60 años y entre quienes ingieren una gran cantidad de fármacos, cada vez es más común escuchar a los pacientes quejarse de este mal.

La boca seca puede ser la antesala de una xerostomíao hiposialia (cuando las glándulas salivales comienzan a tener un mal funcionamiento), cuyas manifestaciones van desde dificultades para hablar hasta problemas para masticar o deglutir. Además, provoca una disminución del sentido del gusto.

"Hay pacientes que llegan a sentir la mucosa y la saliva espesa o filamentosa, mientras otros no pueden ni hablar por el ardor bucal", detalló la directora de Clínicas Dentimagen.

Asimismo, permite la acumulación de gran placa bacterial debido a la incapacidad del flujo salival para arrastrar y reducir las proteínas antimicrobianas que la saliva lleva generalmente a la dentadura.