Los pasos para escribir una buena carta de presentación

En la búsqueda de empleo, la carta de presentación puede una buena herramienta para potenciar el currículo y establecer un vínculo entre los valores de la empresa a la que se postula, su estilo de trabajo, la actitud que requiere de parte de sus empleados y el candidato.

A diferencia del currículo, donde aparece la preparación y las habilidades de la persona para realizar una determinada labor, la carta presenta el lado más humano del interesado y permite conocer mejor sus motivaciones para postular al cargo que se ofrece. Según el sitio FreeMoneyFinance, este documento es el "gancho" para que el empleador lea el currículo y después de la revisión de ambos, se evalúa la posibilidad de una entrevista.

De acuerdo al sitio Associated Content, para escribir la carta, aparte de contar con los datos tradicionales de una carta formal, como fecha, destinatario y cargo de éste dentro de la empresa, es necesario tener claridad sobre las virtudes que se solicitan en el perfil del  puesto y cómo se condicen con las características del postulante. Una vez  claro estos elementos, es hora de comenzar a redactar.

Según Universia.cl, el primer párrafo de la carta de presentación debe explicar con claridad su objetivo, es decir porqué se envía o para postular a qué cargo. La intención de la primera parte es captar el interés del lector mediante el uso de un estilo dinámico y preciso, que lo acerque a la persona  y lo cautive lo suficiente como para continuar leyendo.

En los párrafos posteriores es necesario fundamentar porqué existe interés en trabajar en ese rubro y en esa compañía en particular, señalando cómo eso se relaciona con las características, habilidades y preparación en la materia con que el postulante ha contado a través de su experiencia. Lo relevante de la carta es hacer estas relaciones más que escribir una gran cantidad de datos, ya que estos están disponibles en el currículo.

Para finalizar el documento, es necesario remarcar el interés de trabajar en esa empresa y siempre terminar con un tono positivo, sin derrotismo ni falsa modestia y dejando al puerta abierta para una entrevista después de la revisión del currículo.

En términos formales, es fundamental  cuidar la redacción y ortografía del documento, así como escoger una tipografía sencilla, limpia y fácil de leer, en lo posible siguiendo el mismo estilo del currículo. También es necesario justificar el texto, poner atención a los márgenes y, dentro de lo posible, evitar las palabras en mayúsculas y los párrafos muy largos, ya que la carta no debiera tener más de una carilla de extensión.

Para asegurarse de que la redacción es la adecuada y que el texto explica con claridad sus intenciones, una buena medida es leer la carta en voz alta antes de enviarla: de este modo podrá detectar a tiempo cualquier error y tendrá la oportunidad de corregirlo antes de que llegue a manos de su, ojalá, futuro empleador.