El procedimiento permite partir desde cero y eliminar tu nombre de los registros de morosidad.
Con la quiebra, el deudor podrá buscar la rehabilitación financiera.
El procedimiento de liquidación voluntaria establecido en la Ley 20.720 permite partir desde cero y eliminar tus antecedentes de los registros de morosidad, como el Dicom o el informe de deuda, emitido por la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras (SBIF).
Las liquidaciones de bienes por deudas en personas naturales crecieron cerca de 62 por ciento, al comparar el primer semestre de 2018 y 2019, pasando de 1.438 a 2.328 casos, respectivamente.
Pero, ¿en qué consiste este procedimiento de liquidación de bienes?
La ley 20.720, conocida como Ley de Insolvencia y Reemprendimiento, permite a las personas acogerse a la liquidación voluntaria, o quiebra.
"Esta tiene como objetivo pagar la deuda con la venta de todos los bienes del deudor, y si esta gestión no alcanza para pagar la totalidad de la deuda, ésta igualmente se extingue", dice Ricardo Ibáñez, abogado y fundador de Defensadeudores.cl.
Al declararse en quiebra y someterse a este procedimiento, el deudor podrá buscar la rehabilitación financiera y borrar su nombre de los registros de morosidad.
Se trata de un trámite de carácter administrativo y judicial, ya que el deudor debe entregar sus bienes a un liquidador previa presentación de una solicitud de liquidación al tribunal competente según su domicilio, para lo cual requerirá del patrocinio de un abogado.
También, deberá aportar datos sobre sus deudas, los bienes que posee, su situación laboral. Además, debe proveer detalles de su historial financiero y de cómo llegó a su actual estado de insolvencia.
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