Jason Everman también formó parte de Soundgarden.
Tras su fallida carrera en el rock, se enlistó en el Ejército y ahora es bachiller en Filosofía.
En 2006 abandonó los entrenamientos militares para ponerse a estudiar.
Paso casi inadvertido en el mundo del rock y ahora es reconocido por ser un condecorado integrante del Ejército estadounidense. Jason Everman formó parte de Nirvana y, como si eso fuera poco, también estuvo en Soundgarden, en los años previos a que estas bandas alcanzaran a cultivar el nivel de idolatría que los rodea actualmente.
Según cuenta un artículo publicado en The New York Times, Everman llegó a la banda cuando eran un cuarteto y en la baterían tenían a Chad Channing, quien era su amigo y lo sugirió para ser la segunda guitarra.
Aparte de entregar sus acordes, Everman incluso ayudó económicamente a Nirvana, cuando se hizo responsable de una deuda de 606 dólares que la banda tenía pendiente con el productor que sacó adelante el disco debut "Bleach".
Pero todo concluyo de mala manera. Una gira promocional, con todo lo que conlleva, entre el cansancio, las bromas internas e incluso las disputas más mínimas, terminaron por aburrir a Everman, quien se aisló de la banda. Mientras se hizo evidente que Kurt Cobain y Krist Novoselic lo querían fuera.
La gira se canceló, cada uno emprendió su camino por un tiempo y al momento de reunirse como grupo, el llamado a Everman para que retornara nunca llegó.
"Para ser honesto, no tenía expectativas con los conciertos", afirmó. Y añadió que la relación con el resto de los músicos "sólo se acabó".
Sin advertencia
Tras la época de Nirvana, en 1990, Jason Everman optó por no alejarse de la música por su previa mala experiencia, sino que al contrario optó por entrar a otra banda: Soundgarden.
Al grupo llegó para reemplazar a Hiro Yamamoto, quien había dejado su puesto como bajista tras retirarse repentinamente por no estar de acuerdo con ciertos acuerdos establecidos para el grupo.
Everman salió de gira con Soundgarden por Estados Unidos y Europa, pero en el retorno a Seattle las conclusiones fueron lapidarias. Chris Cornell manifestó que la relación del cuarteto con Everman incluido no estaba funcionando.
"Fue un golpe tremendo. Nunca tuve ningún tipo de advertencia", aseguró Everman.
Ya que los episodios musicales de su vida no resultaron del todo bien, el siguiente paso fue radical y se incorporó al Ejército estadounidense.
"Militaba en bandas geniales, y se me ocurrió hacer la cosa menos cool que podías hacer. Estaba un poco nervioso", aseguró.
En 2006 abandonó los entrenamientos militares para ponerse a estudiar. Ahora a los 45 años recibió su grado de bachiller en Filosofía.
