Los sacerdotes analizan el escenario tras la denuncia contra el religioso Hernán Enríquez por violación.
Chomalí reconoció la denuncia y confirmó la suspensión del sacerdote.
El arzobispo de Concepción, monseñor Fernando Chomalí, citó de urgencia al clero de la capital del Biobío, tras conocerse una denuncia contra el sacerdote Hernán Enríquez por violación.
La reunión se desarrolla desde las 10:00 horas en el Seminario Metropolitano de Concepción, ubicado en la Avenida O'Higgins de Chiguayante.
Al lugar llegó prácticamente la totalidad del clero y Chomalí fue uno de los primeros en llegar, sin embargo no se ha visto al sacerdote Enríquez en el lugar.
Este martes, monseñor Chomalí confirmó que el acusado está suspendido de sus funciones sacerdotales y pidió a quien hizo la denuncia de manera anónima, que se acerque al Arzobispado y a la justicia civil para entregar más antecedentes.
Según la denuncia, la víctima de violación es un ex seminarista que en el año 2002 (al momento de ocurridos los hechos) tenía 14 años. Fue su padre quien acusó los hechos (las identidades de ambos se mantienen en reserva) y durante esta jornada se refirió a los hechos a través de un mail enviado al portal Sabes.cl.
"Todo este tiempo he hecho bastante y estoy muy agotado emocionalmente. En su momento y después he hecho de todo y lo que me correspondía hacer como padre: Fui a Fiscalía, a la PDI, a Tribunales, conversé e hice denuncia ante el arzobispo, al Vaticano, etc", señaló el padre de la víctima.
"Mi señora ha sufrido mucho también... para qué decir de mi hijo, el ha querido olvidar esto y cuando escucha o ve situaciones parecidas le afectan muchísimo... No quiere ver noticias relacionadas con los abusos de los personeros de la iglesia. Creo que ahora, "el cuarto poder" , ustedes, la prensa, ha hecho lo que faltaba...", agregó.
"Esto tiene que ser clarificado jurídicamente"
Al terminar la reunión pocos sacerdotes salieron por el frontis de el Seminario Metropolitano de Concepción, sin embargo, el párroco Luis Figueroa, entregó su opinión acerca del tema.
"Ojala realmente tenga un medio para poder ayudarle a rearmar su propia vida que ha sido frustrada por alguien que se equivocó en enfrentar la evangelización. Esto es un delito y por supuesto que tiene que ser clarificado juridicamente", expresó Figueroa
Caiga quien caiga
En tanto, la Red Juvenil del Laicos espera que se sepa toda la verdad "caiga quien caiga", así lo destacó Pablo Durán, uno de los voceros del colectivo que se refirió a la actual situación.
"Consideramos que es una medida preventiva que está bien y que mientras dure el proceso es necesario", señaló Durán.
"Hoy se tiene que saber todo lo que se tenga que saber, nosotros somos claros y queremos que sepa toda la verdad, pero eso también involucra que cuando hay denuncias anónimas y las mismas personas no quieren que se sepan sus nombres, eso también se tiene que respetar", concluyó el vocero.
"Aprendí a tomar en el seminario"
Un ex seminarista, que pidió la reserva de su identidad, conversó con Cooperativa y entregó detalles de cuales eran las situaciones que se vivían al interior del seminario menor de Concepción.
"Yo me percataba que todas las noches, el padre Herán llegaba tarde a las dos o tres de la mañana, y siempre llegaba con uno de los chicos del seminario, a veces llegaba con otra persona externa al seminario", aseguró el ex semiranista.
"Yo nunca había fumando y aprendí a hacerlo al interior del seminario, nunca había tomado y aprendí a tomar dentro del seminario", agregó.
Las acusaciones se centran en la figura del párroco, Hernán Heríquez, el que se encuentra apartado de las funciones ecleciásticas bajo la restricció de aparecer oficiando misas o realizando clases al interior del instituto de teología
