El Gobierno de Bolivia identificó al menos a unos 400 bolivianos afectados por el incendio en la toma Laguna Verde de Iquique y activó las acciones de apoyo como la reposición de la documentación afectada tras el suceso.
El viceministro de Comercio Exterior, Benjamín Blanco, informó que todavía se trata de una "cifra preliminar", entre adultos y niños, puesto que con el paso de las horas "siguen apareciendo afectados". En la víspera, la cifra era de 40 personas.
Entre los damnificados, que son personas que se encuentran "en situación de movilidad humana", hay también peruanos, colombianos y venezolanos, quienes junto a los bolivianos están instalados provisionalmente en escuelas de Iquique, precisó un comunicado del Viceministerio de Comunicación en Bolivia.
El Gobierno chileno anunció que se construirán "viviendas sociales para todas las personas que perdieron sus casas" y ante ello desde Bolivia se colaborará "en la reposición de documentación de identidad de nuestros compatriotas", manifestó el cónsul boliviano en Iquique, Eloy Poma.
Al menos unas 250 viviendas resultaron consumidas por las llamas el lunes como consecuencia del incendio en el asentamiento Laguna Verde de Iquique.
El cónsul boliviano en Chile mencionó que muchos de los afectados "se quedaron solo con la ropa puesta" ya que salieron temprano a trabajar y cuando regresaron vieron que sus pertenencias quedaron reducidas a cenizas.
"El Consulado llevó algunas vituallas, agua y otros enseres a las familias afectadas que se encuentran en las unidades educativas", refiere la nota del Gobierno boliviano.
Para miles de migrantes, Iquique es la primera parada en la que pueden asentarse temporalmente antes de continuar a otras ciudades chilenas o tratar de regularizar su situación.
