Un hombre se disgustó por la derivación a otro centro de salud de su madre y lanzó un elemento contundente.
Es el tercer hecho en menos de dos semanas en el mismo centro de salud.
El recinto es blanco de ataques en el último mes.
Los funcionarios de salud del Cesfam Leocán Portus de Talcahuano están cansados por el trabajo realizado en esta pandemia, pero también atemorizados por los constantes ataques de los que son víctimas, ya que en menos de un mes, por tercera vez recibieron una embestida de un paciente enojado.
Ximena Bujes, secretaria de la Asociación de Funcionarios del Cesfam Leocán Portus de Talcahuano, detalló que "se acercó un joven con su mamá a pedir atención de urgencia, no tenemos urgencia -en la mañana-, ya que empieza a funcionar después de las cinco de la tarde y como no era vital había que derivarlo al Sar correspondiente o al Hospital Higueras. Se enojó pescó a su mamá, amenazó y se fue".
"Luego agarró un tuerca grande y la arrojó amenazando a los funcionarios que estaban ahí. El vidrio tiene un blindado entonces no alcanzaron a salir los vidrios hacia adentro, pero los usuarios y los funcionarios estaban muy asustados", detalló.
Esto se suma a lo ocurrido el pasado 27 de marzo, instancia en la que una turba los atacó a palos. Piden mayores medidas de seguridad, pero con la salvedad de que "Carabineros no está validado, nosotros pedimos que vengan los militares".
Nuevo ataque a Cesfam Leocan Portus de Talcahuano. Sujeto al que no le gustó que derivaran a su madre a un Sar por no haber urgencia allí tomó una tuerca grande y la lanzó contra un vidrio. Funcionarios piden que militares resguarden el lugar en estado de excepción @Cooperativa
— Cristofer Espinoza (@CEspinozaQ) April 6, 2021
La dirigenta agregó que "el alcalde nos dijo que se va a cerrar el acceso vehicular por un mes". Al respecto, el alcalde (s) de Talcahuano, Alexis Silva, agregó que "como Municipalidad vamos a presentar las querellas contra quienes resulten responsables".
Al ataque perpetrado en el Cesfam de Talcahuano y, el día de ayer, en el Hospital Carlos Van Buren de Valparaíso, se suma un tercero en el Cesfam de Curicó, en la Región del Maule.
Un sujeto -que no se identificó- con un corte en la cabeza pidió asistencia médica y al no recibir atención comenzó a lanzar piedras: "Se enojó con los funcionarios, agredió a dos funcionarios tirándole puntapiés y combos, donde después se fue hacia la calle y empezó a apedrear nuestro Cesfam, porque el Sapu está dentro de nuestro recinto Cesfam Curicó Centro, rompiendo los vidrios en las mamparas y también por el lado del costado del Cesfam rompiéndole los vidrios a los box", detalló Hugo Farías, dirigente de la Asociación de Funcionarios de Trabajadores de la Atención Primaria de Salud del Maule.
El sujeto pasó a control de detención y fue formalizado por daños simples, por el artículo 318 por poner en peligro la salud pública, quedando sin medidas cautelares.
El doctor Tomás Regueira, encargado de levantar las cifras de la red asistencial en el Minsal, señaló en Cooperativa que lo que pasó en Valparaíso "es una situación aislada", pero que es más frecuente es la zona sur oriente de Santiago, donde "muchas veces llegan baleados, bandas narco y llega la otra banda, la venganza" y "frecuentemente tienen que cerrar sus puertas por agresividad y llamar a Carabineros", situación que se vive desde mucho antes de la pandemia.
Desde la Confederación Nacional de Funcionarios de la Salud Municipal (Confusam), su presidenta nacional, Gabriela Flores, expresó que "la gente tiene temor a trabajar por las amenazas que hacen esta gente descontrolada en los centros de salud. Estamos en una pandemia y que se estén dando estos episodios es preocupante, con todo el trabajo y sobrecarga por todas las vacunaciones y cumpliendo metas que nos exigen, nos vemos enfrentados por parte de algunos personajes que hay en algunas comunas".
Sobre el cambio tras la promulgación de la ley que elevó las penas a quienes agredan al personal de salud, promulgada el año pasado, Flores criticó que "el tema pasa, aquí voy a responsabilizar a los municipios, es que no hacen las denuncias como corresponde. Hay 500 agresiones que ha sufrido nuestra gente, y en la práctica hay 180 denuncias".
