Quienes incumplan la obligación se arriesgan a pasar a un control sanitario con sanciones que pueden llegar a los 2,5 millones de pesos.
La medida busca evitar el avance del coronavirus en el país.
Desde este miércoles es obligatorio el uso de mascarillas en el transporte público y privado remunerado de todo Chile para evitar la propagación del coronavirus.
La medida, que comenzó a regir a las 05:00 horas, afectará a quienes viajen en Metro, buses urbanos e interurbanos, trenes, transporte aéreo y marítimo, taxis básicos, taxis rurales y colectivos, además de transfers y transporte privado de traslado de personal.
De acuerdo al Código Sanitario, quienes infrinjan la medida se arriesgan a pasar a un control sanitario con sanciones que pueden llegar a los 2,5 millones de pesos.
La seremi (s) de Salud Metropolitana, Daniela Zavando, detalló que el procedimiento que se efectúa por no usar una mascarilla es el levantamiento de "un acta de sumario sanitario hacia la persona, en el caso que fuera un conductor el que está incumpliendo sería tanto al conductor como el empleador".
"Este sumario sanitario se inicia, ellos tienen la posibilidad de hacer algún descargo a través de correo electrónico, y eso da origen después a una multa, evaluados los antecedentes", agregó Zavando.
El anuncio se dio el lunes luego que el ministro de Salud, Jaime Mañalich, afirmara que "es absolutamente prudente" utilizar mascarillas en lugares con alta cantidad de personas durante la emergencia sanitaria.
Dada la escases de estos implementos el Gobierno ha publicado instructivos muy didácticos para que cualquier persona pueda elaborar una mascarilla en su casa con materiales caseros, como poleras, paños y otros géneros, con las debidas instrucciones de uso y posterior descarte.
Según las últimas cifras entregadas por las autoridades, actualmente en Chile hay 5.116 casos confirmados de Covid-19 y 43 fallecidos.
El país se encuentra bajo el estado de excepción por catástrofe, con toque de queda nacional desde las 22.00 hasta las 5.00 horas del día siguiente, con las clases suspendidas hasta mayo y con las fronteras, los centros comerciales, los cines, los restaurantes y los comercios que no sean de primera necesidad cerrados.
El Gobierno ha descartado decretar la cuarentena obligatoria en todo el territorio, como han hecho otros países vecinos con menos casos como Argentina, Bolivia, Colombia y Perú, y se inclina de momento por una "cuarentena progresiva", que depende de la evolución de los contagios.
