Javier Castillo aseguró que se le comunicó al titular de Minería los problemas en la mina.
Acusó una "falta de respeto" a la palabra de los trabajadores.
El presidente del sindicato de la mina San José, Javier Castillo, aseguró que se le advirtió al ministro de Minería, Laurence Golborne, de los problemas en el yacimiento, acusando una falta de respeto "escandalosa" a la palabra a de los trabajadores.
En el tema de seguridad minera, recalcó Castillo, "fuimos tan majaderos que hasta se nos trató de insolentes, hasta de locos, de irresponsables, cómo se nos ocurría plantear el cierre de la mina, que no se puede trabajar, porque la gente va a quedar cesante".
En conversación con Una Nueva Mañana, Castillo dijo que a todos los gobiernos "les dijimos las condiciones laborales en esta mina no se pueden hacer", problemas que plantearon ante la comisión de Trabajo de la Cámara de Diputados a fines de junio.
"Le dijimos que no solamente la negociación colectiva (fallaba), sino que la normativa legal no sirve, ya que la situación precaria de los trabajadores obliga a condiciones como la de minera San Esteban, que ya cargábamos tres muertos" y el 1 de julio "se lo planteamos al ministro".
Castillo, también presidente de la CUT provincial, dijo que le pidieron una reunión cuatro días después "con una pierna en la mano" tras el accidente de Gino Cortés, pero les dijo que "tenía su agenda copada para atendernos" y los recibió una secretaria, así que "no digan que no estaban informados", recalcó.
"El problema del ministro" y de quienes administran "es que no tienen idea del idioma de los trabajadores, no lo entienden", dijo Castillo, acusando una "falta de respeto" a su palabra porque Golborne le negó haber conversado con él el 1 de julio, porque según él estaba en Copiapó.
Por ello, dijo Castillo, también presentarán una denuncia por prácticas antisindicales ante la CUT porque no les han dado acceso a la información y los tuvieron retenidos, siendo que ellos necesitan contactarse con sus asociados.
Además, Castillo acusó de contradictoria la actitud del dueño de la empresa Alejandro Bohn, porque "estamos frente a una empresa que no tenía la capacidad económica ni moral para desarrollar faenas mineras y eso tendrá que ser sancionado" porque no queremos que se vuelva "un problema entre privados", pidiendo un castigo "ejemplificador".
