Los obispos indicaron que para mejorar la educación "no basta con la inyección de recursos".
Los prelados mostraron su confianza en los distintos protagonistas lograrán un acuerdo.
La Conferencia Episcopal se refirió al conflicto estudiantil que ya suma seis meses de manifestaciones en el país, calificando las demandas educacionales como "justas y postergadas".
En un c
omunicado, el organismo señala que "hemos sido testigos de un proceso de formulación de justas y postergadas demandas para mejorar la calidad de la educación y asegurar su acceso a todos los niños y jóvenes".
Los obispos recalcaron que "para lograr esto no basta la inyección de recursos económicos ni mejorar la infraestructura o cambiar leyes. Es necesaria, además, la formación integral de los estudiantes que los capacite como honestos ciudadanos y personas con valores humanos y trascendentes".
"Confiamos en que la disposición al diálogo de parte de quienes representan a las instituciones políticas, educacionales y sociales de nuestro país, así como de los mismos estudiantes, hará posible los acuerdos necesarios para que éstas se traduzcan en políticas que favorezcan el bien común de la sociedad, y especialmente resguarden a los más desfavorecidos y vulnerables", sentenciaron.
