La Subsecretaría de Salud Pública instruyó a esperar a que se tenga la edad suficiente para definir su sexo.
La medida fue valorada por el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual.
Los intersexuales tienen un sexo biológico con características femeninas y masculinas.
La Subsecretaría de Salud Público emitió un circular que ordena a los recintos médicos detener toda intervención quirúrgica a niños y niñas intersexuales.
"Se instruye a que se detengan los tratamientos innecesarios de 'normalización' de niños y niñas intersex incluyendo cirugías de genitales irreversibles hasta que tengan edad suficiente para decidir sobre sus cuerpos", indicó la circular firmada por el subsecretario de Salud, Jaime Burrows y por la encargada de Redes Asistenciales, Gisela Alarcón.
La medida fue aplaudida por el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) que además precisó que "si bien es cierto desde hace mucho años que las cirugías a recién nacidos intersexuales ya casi no se realizan y se espera a que los niños y niñas crezcan para tomar una decisión, nada garantiza que estas prácticas estén totalmente erradicadas, lo cual es un peligro para la calidad de vida de las personas".
Tras esto, la activista trans del Movilh, Paula Dinamarca, explicó que los intersexuales son "las personas nacidas con un sexo biológico con características femeninas y masculinas, lo que impiden saber al comienzo si son hombres o mujer".
"Antiguamente era muy común someter a cirugías al momento de nacimiento, decidiéndose casi al azar si la persona era mujer u hombre, lo cual trajo serios y graves problemas cuando hubo equivocaciones", añadió.
Estas prácticas fueron denunciadas por el Movilh ante el Comité de Derechos del Niño de la ONU y a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, las mismas que junto a la OMS han pedido al Estado de Chile que adopte medidas para prevenirlas y erradicarlas totalmente.
Además de impedir cirugías a los recién nacidos, la circular de la Subsecretaría de Salud Pública se comprometió a elaborar un protocolo al respecto, en términos similares a los que ya existen desde el 2011 para la población transexual.
