Soldados israelíes recibieron órdenes de disparar a matar, según diario
Desde el inicio de la segunda intifada los uniformados tenían como obligación disparar contra "niños y adolescentes que se subían a los carros de combate", según The Guardian.
Varios soldados israelíes denunciaron haber recibido de sus superiores órdenes de disparar a matar contra civiles palestinos desarmados sin que tuvieran que preocuparse por un eventual castigo.
El diario británico The Guardian indicó que recogió varios de esos testimonios gracias a la ayuda del grupo israelí Romper el Silencio, integrado por ex militares de ese país que quieren que la opinión pública israelí haga frente a la realidad en los territorios ocupados.
Aunque quienes se deciden a denunciar esas órdenes, que violan claramente las convenciones de Ginebra, son todavía una minoría, sus testimonios reflejan una cultura de impunidad muy extendida, criticó el periódico.
Un soldado israelí identificado sólo como Assaf declaró a The Guardian haber recibido órdenes de sus superiores en el verano de 2002 de entrar en la ciudad de Dir al Balah, en la banda de Gaza y "matar a toda persona" que viese en la calle.
El soldado afirmó haber cumplido esas órdenes sin rechistar: "Si cuento esto es porque quiero que el Ejército (israelí) reflexione sobre lo que nos está obligando a hacer: matar a personas desarmadas".
Assaf no es, sin embargo, una excepción, dijo el periódico, según el cual en los últimos meses docenas de soldados, incluido el hijo de un general israelí, todos ellos recién licenciados, se decidieron a relatar las órdenes recibidas de matar a civiles sin temor a ser sancionados.
Otro soldado, identificado por el periódico sólo como Moshe, declaró que como parte de su formación de sargentos, él y sus colegas recibieron órdenes de tender emboscadas y matar a palestinos.
Antes de una de las operaciones, les dijeron que estarían a la caza de hombres armados, pero entre sus blancos había también niños y adolescentes que se subían a los carros de combate cuando éstos pasaban por calles estrechas.
"Nos dijeron que tirásemos a matar a quien se subiese a un vehículo acorazado", relató el soldado, quien dijo que uno de los francotiradores de su unidad disparó y mató a un menor que podía tener entre ocho y 12 años, y que otra compañía informó de un caso similar.
"Durante la primera intifada (1987-1993), había reglas claras por escrito sobre cómo debían comportarse los soldados, pero en la segunda (2000 en adelante) no existen prácticamente, lo que deja a oficiales y soldados un amplio margen de interpretación", criticó Sarit Michaeli, del grupo israelí de derechos humanos B'Tselem.
Según este grupo, 3.269 palestinos han muerto por la actuación de las fuerzas de seguridad israelíes en casi cinco años, de los que 1.700 se cree que son civiles y 654, menores.
Sin embargo, en ese mismo período de tiempo, el Ejército israelí ha investigado sólo 131 casos de soldados que han abusado de sus armas de fuego, lo que ha tenido como resultado 18 procesos legales y siete condenas. (EFE)