Ex presidente de Livedoor fue acusado formalmente de fraude bursátil por Japón

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Autor: Cooperativa.cl

Takafumi Horie, otrora ícono de los nuevos ejecutivos nipones, aún no admite los cargos, pero su participación en la violación de la Ley de Intercambio de Valores fue develada por sus ex ejecutivos.

La Fiscalía de Japón acusó este lunes, formalmente, a Takafumi Horie, ex presidente de Livedoor, y a otros tres altos ejecutivos de la empresa de internet de falsear información financiera para adquirir una casa editorial en 2004.

 

Los cuatro ex directivos también fueron acusados de inflar en noviembre de 2004 los resultados financieros de Livedoor Marketing, una filial del grupo Livedoor conocida entonces como ValueClick Japan, con el objetivo de elevar su cotización en bolsa, indicó un portavoz de la fiscalía.

 

Livedoor está siendo investigada por su presunta violación de la Ley de Intercambio de Valores.

 

Estas cuatro personas se encontraban en prisión provisional desde el 23 de enero pasado y ahora se espera que la Fiscalía de Tokio dictamine una nueva orden de detención a fin de poder someterlos a un nuevo interrogatorio sobre los cargos presentados.

 

La orden de detención provisional de los cuatro ex miembros de la cúpula de Livedoor, encabezados por su presidente, vencía este lunes.

 

Aunque Horie, de 33 años, ha negado todas las acusaciones que recaen sobre él, los otros tres sospechosos admitieron todos los cargos y la participación del entonces presidente en los fraudes relacionados con Livedoor, indicaron fuentes cercanas a la investigación, citadas por la agencia Kyodo.

 

Además de Horie, el resto de acusados son Ryoji Miyauchi, ex jefe financiero de Livedoor; Fumito Okamoto, ex director y presidente de Comercialización de ese grupo, y Osanari Nakamura, presidente de Livedoor Finance.

 

Según la Oficina Fiscal del Distrito de Tokio, la cúpula de Livedoor anunció en octubre de 2004 que su filial ValueClick tenía previsto adquirir la editorial MoneyLife mediante una operación de intercambio de acciones.

 

Sin embargo, subrayan los fiscales, en realidad esta firma editorial ya había sido comprada por otra entidad bajo control de Livedoor.

 

En enero pasado, el escándalo en torno a Livedoor causó el caos en la Bolsa de Tokio, que registró caídas históricas.

 

La noticia de que la sede de Livedoor y la residencia de su entonces presidente eran registradas provocó fuertes ventas y desplomes de más de 400 puntos durante dos días consecutivos en el índice selectivo Nikkei, de los 225 principales valores. (EFE)