En Jueves Santo, la Iglesia Católica fustigó violencia en la sociedad
Durante la Misa Crismal celebrada en la Catedral Metropolitana, el obispo Cristián Contreras recordó el crimen de Hans Pozo, el que conmueve por su "violencia inusitada".
La tradicional Misa Crismal de Jueves Santo fue la tribuna que usó la Iglesia Católica para criticar la violencia presente en el país, la que ejemplificó con el homicidio y posterior descuartizamiento del joven Hans Pozo Vergara.
Durante la homilía en la Catedral Metropolitana, el obispo auxiliar de Santiago, Cristián Contreras, comentó que "en lo personal, no puedo entrar en estos benditos días omitiendo el impacto provocado por la noticia de un joven cruelmente asesinado en nuestra ciudad de Santiago".
"Conmueven todas las muertes y más cuando la vida es quitada con una violencia inusitada. Conmueve la violencia en tantas de nuestras poblaciones", sentenció.
La Misa Crismal fue encabezada por el cardenal Francisco Javier Errázuriz, y durante ella -como en todas las catedrales católicas del mundo- los sacerdotes reafirmaron sus votos.
El cardenal destacó que la enseñanza de Jesús, cuya muerte se conmemora este viernes, dejó un mensaje claro a los religiosos de su iglesia y que se traduce en que "se acercaran con humildad a sus hermanos, como servidores".
Tras la misa, beneficiarios del Hogar de Cristo y el capellán de la organización, Agustín Moreira, recrearon la Ultima Cena y lavado de pies que hizo el denominado hijo de Dios a sus 12 discípulos. (Cooperativa.cl)