Banco Asiático de Desarrollo ofreció 60 millones de dólares de ayuda a Indonesia
El BAD comprometió su colaboración con la nación afectada por un terremoto el pasado sábado, que ya ha cobrado la vida de 5.623 personas.
El Banco Asiático de Desarrollo (BAD) ofreció a Indonesia una subvención de 10 millones de dólares y créditos blandos por otros 50 millones para la rehabilitación de las zonas dañadas por el terremoto de 6,2 grados que sacudió ese país el sábado 27 de mayo.
"Vamos a asistir a Indonesia con lo que haga falta y a proporcionar más recursos para ayudar a que los afectados reconstruyan sus vidas y sus casas", prometió el presidente del BAD, Haruhiko Kuroda, tras una reunión con el presidente indonesio, Susilo Banbang Yudhoyono, en Yogyakarta.
Yogyakarta, a unos 400 kilómetros al sureste de Yakarta, es la principal ciudad en el área dañada por el devastador terremoto.
"Habiendo ocurrido tan pronto después del maremoto y el tsunami de 2004, nuestros corazones se unen a la población de Indonesia", añadió Kuroda, durante la visita que realiza a la zona de la catástrofe.
En tanto, el Ministerio de Asuntos Sociales indonesio informó que la cifra de muertos por el terremoto ascendió ya a 5.623.
Gran parte de las víctimas mortales contabilizadas hasta el momento proceden de los distritos sur y norte de la ciudad javanesa de Yogyakarta, pero otras zonas no han recibido aún ayuda.
El grueso de la operación humanitaria se ha concentrado en Bantul, la localidad más cercana al epicentro y la que ha registrado la mayor destrucción: 3.082 muertos, según el balance provisional del Gobierno, y el 80 por ciento de casas derruidas en algunos barrios.
Además, unas 200.000 personas han sido desplazadas por el sismo, al haber perdido sus hogares. Agua potable, tiendas de campaña y material sanitario son las principales necesidades en las áreas devastadas.
Los hospitales siguen desbordados, aunque cada vez son más los médicos y el personal auxiliar que llegan para ayudar.
El presidente Yudhoyono trasladó temporalmente su despacho a Yogyakarta para dirigir de cerca las operaciones humanitarias y de rehabilitación, a poco más de un año de la peor tragedia del país, cuando en diciembre de 2004 más de 150.000 personas perdieron la vida en un terremoto y posterior maremoto. (EFE)