Fiscal espera aclarar este viernes eje central del triple parricidio de Maipú
Ricardo Freire confía en determinar durante esta jornada si la carta del suicida que mató a su esposa y dos hijas da cuenta de una decisión conjunta de la pareja.
El fiscal Ricardo Freire confía en que durante este viernes podrá tener el informe pericial sobre la carta dejada por Cristián Campos Candia, el joven de 21 años que se suicidó tras confesar el asesinato de su esposa y las dos hijas de la pareja.
La tesis que maneja el Ministerio Público, según el primer análisis de la misiva, es que fue escrita por dos personas.
Además, por los antecedentes familiares de Campos y su esposa, Johanna Castro, se presume que podrían haber acordado su muerte, pues la mujer ya tenía intentos de suicidio previos.
"Si en esta nota está efectivamente la letra de la mujer también, sin duda podemos suponer que ella consintió de algún modo este hecho. Si en una nota de despedida, una nota de despedida suicida, está la letra de la mujer es porque la mujer de algún modo ya tenía presupuestado" el hecho, explicó el fiscal.
También se investiga la presencia de químicos -en particular Diazepam- en los cuerpos de Castro y sus dos hijas, Nicole, de cuatro años, y Camila, de uno.
Así, el triple parricidio podría haber consumado mientras las tres víctimas estaban sedadas.
En tanto, durante esta jornada también debe materializarse la entrega por parte del Servicio Médico Legal (SML) de los cuerpos de los cuatro protagonistas de la trágica historia a sus familiares.
Entre estos, el padre de la joven, Héctor Castro, defendió el comportamiento de su hija y descartó cualquier incidente de carácter siquiátrico previo.
"Mi hija era un niña muy sana, preocupada de sus hijos al ciento por ciento (...) por ningún motivo, aseguro que no es así", respondió al ser consultado sobre el atentado contra su vida que protagonizó Johanna a los 14 años.
Cristián Campos Candia se suicidó el jueves 29 de junio, lanzándose desde el piso 27 de un edificio de avenida Apoquindo. Antes de tirarse al vacío, confesó el triple parricidio a Carabineros, quienes al llegar a su casa comprobaron la veracidad de su declaración.
La inspección de la vivienda de la pareja, ubicada en la Villa Versalles II, en la comuna de Maipú, no reveló señales de violencia, lo que refuerza la tesis de una muerte acordada. (Cooperativa.cl)