Grupo extremista islámico es el principal sospechoso de ataques en Bombay
Fuentes policiales creen que las siete explosiones que costaron la vida a 183 personas fueron obra del movimiento Lashkar-e-Toiba, que actúa en Cachemira, región disputada por India y Pakistán.
Investigaciones policiales tienen como primer responsable de los atentados efectuados el martes 11 de julio en Bombay, al grupo extremista islámico Lashkar-e-Toiba (LeT), informó este miércoles P.S. Pasricha, director general de la policía del estado Maharashtra.
"El modo de operación es similar al que han usado las células de Lashkar-e-Toiba pero aún no podemos confirmar con exactitud que son ellos, por que no han llegado los informes oficiales", declaró Pasricha en referencia al grupo que tiene su base en Cachemira, región disputada por India y Pakistán.
La posible implicación del LeT fue apuntada desde pocas horas después del atentado por varios medios indios, que citaron fuentes policiales anónimas, aunque esta es la primera vez que la hipótesis la realiza un alto responsable policial.
Sin embargo, el portavoz de Lashkar-e-Toiba negó estas afirmaciones ya que afirmó que el grupo no permite la muerte de inocentes.
"Condenamos firmemente las explosiones en los trenes de Bombay y refutamos las acusaciones que implican a nuestro grupo con las masacres", afirmó este miércoles, a la agencia de noticias France Press.
"Nuestra guerra es contra las fuerzas indias en Cachemira, el islam no pemite la muerte de inocentes", agregó.
Fuentes policiales minimizaron estas declaraciones porque aseguraron que las siete explosiones casi simultáneas realizadas a los trenes saturados de la ciudad financiera, en donde 183 personas murieron y 714 resultaron heridas, es su táctica habitual.
La policía cree que los siete explosivos estaban compuestos de material RDX, el más usado por el LeT, y que fueron activados por temporizadores preparados para estallar alrededor de las 18:15 hora local (12:45 GMT).
Los atentados fueron llevados a cabo con gran precisión y siguiendo una pauta que recordó a los ataques del 11 de marzo de 2004 en Madrid y el 7 de julio de 2005 en Londres, aunque los medios indios no prestan prácticamente atención a ese detalle y se centran en la hipótesis de la conexión paquistaní.
Ante esto, el presidente de Pakistán, general Pervez Musharraf, fue uno de los primeros en condenar "con firmeza" este atentado, que calificó, al igual que el Gobierno indio, como un "acto terrorista".
Anteriormente, Nueva Delhi acusó al grupo Lashkar-e-Taiba de ser culpable junto con otro grupo extremista islámico de un ataque contra el parlamento federal indio en diciembre de 2001, lo que provocó una crisis diplomática entre India y Pakistán.
Los dos países se disputan la provincia de Cachemira después de su división en 1947. Nueva Delhi ha acusado de manera reiterada a Islamabad capital de Pakistán de ayudar a los rebeldes islamistas a operar en la parte india de Cachemira. Pakistán ha negado estas acusaciones. (Agencias/EFE)