Presidente de Somalia pidió el envío de una misión africana de paz
Luego que se conociera la decisión etíope de retirar sus tropas en el país, Abdulahi Yusuf Ahmed solicitó la acción de la comunidad internacional para reforzar las instituciones del Gobierno y mantener el control en territorio somalí.
El presidente de Somalia, Abdulahi Yusuf Ahmed, pidió este viernes que se envíe una misión de paz africana a su país para garantizar la seguridad ante el anuncio de Etiopía, que ha ayudado al Gobierno a expulsar a las milicias de los Tribunales Islámicos, de que retirará sus tropas en cuestión de semanas.
"Os rogamos que os aseguréis de que se pone en marcha de forma inmediata el rápido despliegue de una misión africana de paz de acuerdo con las bases de la Resolución 1.725 del Consejo de Seguridad de la ONU", dijo Yusuf a los asistentes de la reunión del llamado Grupo Internacional de Contacto.
"Necesitamos apoyo financiero y técnico para reforzar nuestras instituciones de gobierno y que éstas estén en posición de realizar su deber de mantener la paz y la seguridad", agregó el presidente, en el discurso que pronunció a puerta cerrada, y al que tuvo acceso la agencia española EFE.
Los acontecimientos de las últimas semanas, según Yusuf, suponen "una rara oportunidad y un avance genuino". "El Gobierno -añadió- tiene el control de casi todas las regiones del país, y los 'señores de la guerra' que lo hundieron en la miseria así como los Tribunales Islámicos han sido expulsados".
"Mi Gobierno está comprometido a hacer lo que sea para asegurar un gobierno democrático en Somalia. Esta es una oportunidad real y no queremos malgastarla", concluyó.
Yusuf preside el Gobierno de Transición somalí, creado en Kenia en 2004 tras un proceso de paz de dos años y el primero que cuenta con reconocimiento internacional desde el derrocamiento en 1991 del dictador Mohamed Siad Barré, que sumergió al país en el caos.
Yusuf pidió nada más tomar posesión de su cargo una fuerza de paz internacional que ayude a su Gobierno a mantener el control en el país, pero su pretensión sólo ha hallado obstáculos.
La Unión Africana dio el visto bueno al despliegue de una fuerza llamada Igasom, que estaría compuesta por países de la Autoridad Intergubernamental para el Desarrollo (IGAD), integrada por los países de la región y que auspició el proceso de paz.
Pero la mención de cualquier presencia extranjera en Somalia causó la ira de la Unión de Tribunales Islámicos que ocuparon Mogadiscio en junio pasado y posteriormente se extendieron por vastas áreas del centro y sur del país.
La Unión prometió llevar una guerra santa contra cualquier tropa invasora, mientras el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó en diciembre que autorizaba el envío de una fuerza militar a Somalia.
Aunque los tribunales islámicos han perdido todas sus posiciones en las últimas dos semanas a manos de fuerzas gubernamentales respaldadas por tropas etíopes, se teme que sus militantes sigan lanzando ataques para desestabilizar al Gobierno y causen en Somalia una situación similar a la que vive Irak. (EFE)