Israel seguirá adelante con obras en la Explanada de las Mezquitas
El Gobierno hebreo no dará marcha atrás en la construcción de ramplas, a pesar del rechazo del mundo musulmán, que ha derivado en incidentes en Jerusalén.
El Consejo de Ministros israelí decidió continuar las obras emprendidas cerca de la Explanada de las Mezquitas de Jerusalén, ignorando las encendidas protestas del mundo musulmán, aunque se comprometió a coordinar el proyecto con organismos internacionales.
Los trabajos deberán "llevarse a cabo de forma que acaben lo antes posible" y "en coordinación con organismos internacionales, así como manteniendo la mayor transparencia sobre el terreno", señaló un comunicado emitido tras el consejo.
El Ministerio de Relaciones Exteriores, sigue la nota, "seguirá lidiando con los aspectos internacionales del proyecto, inclusive en lo que respecta a la Unesco", que ha pedido explicaciones sobre las repercusiones de las obras.
Por otra parte, se mantendrá el operativo policial y de inteligencia para prevenir posibles incidentes.
El ministro para Asuntos de Jerusalén, Yaacov Edery, será responsable del conjunto del proyecto y la labor informativa al respecto se coordinará con la oficina del primer ministro, Ehud Olmert.
El comunicado precisa que los ministros coincidieron en que las excavaciones que se efectúan en un lugar cercano a la Explanada de las Mezquitas, para poner las bases de una nueva rampa de acceso a la misma, "no causan ningún daño a los lugares santos islámicos".
La continuación de las obras fue aprobada por todos los ministros presentes -tres estaban ausentes- y pese a las reservas expresadas de antemano por el ministro de Defensa, Amir Peretz.
Este propuso en el Consejo de Ministros la formación de un comité que trate con las autoridades musulmanas a fin de explicarles que las obras no afectarán a las mezquitas y lograr así su apoyo al proyecto.
Este domingo se reanudaron las obras, tras el descanso sabático, y las protestas, de momento, han sido mínimas, aunque se mantiene un estricto control policial y siguen desplegados unos 2.000 agentes en la ciudad vieja.
El viernes y el sábado hubo fuertes manifestaciones en torno a las mezquitas que degeneraron en enfrentamiento entre la policía israelí y manifestantes.
Una treintena de personas resultaron heridas el viernes y el sábado la policía detuvo a 70 manifestantes en Jerusalén y en el distrito cisjordano de Belén. (EFE)